Cristóbal López decidió dejar de pagar la deuda a la AFIP

Volver al pago chico y no pagar las deudas impositivas. Así se perfila la nueva estrategia del empresario K, Cristóbal López que asegura ser víctima de "persecución política".

López dejó a su petrolera, Oil Combustibles, a un paso de la convocatoria de acreedores al ordenar a los bancos con los que opera que no le debiten más el dinero requerido para hacer frente a las cuotas mensuales de los planes de pago que acordó con la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP ). Esto incluye los $8000 millones de rojo impositivo que sumó en los últimos 4 años de kirchnerismo.

Pero la estrategia no termina ahí. Según el periodista Hugo Alconada Mon el empresario aceleró los trámites para mudar la sede de la petrolera desde sus oficinas porteñas hasta Comodoro Rivadavia, su pago chico, donde confía en que recibirá un mejor trato judicial.

El Grupo Indalo decidió transferir solo el 26% correspondiente del Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC) que se genere de ahora en adelante. En tanto, López y su socio Fabián De Sousa mueven todo para que el domicilio social histórico de la petrolera, en avenida Córdoba 657, pase a Hipólito Yrigoyen 4250, en el barrio industrial de Comodoro Rivadavia, Chubut, provincia de donde es oriundo López.

La movida de los dueños del Grupo Indalo, uno de los que más creció en la era K, cuenta con un antecedente reciente en esa misma senda. A mediados del año pasado la familia Kirchner intentó pasar a la justicia federal de Santa Cruz la causa Hotesur, donde se investigaba el presunto lavado de dinero.

SIN AUTOPISTA

Las malas noticias siguen llegando para el "zar del Juego" ya que el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, confirmó que el Gobierno intervino la autopista Ezeiza Cañuelas, que operaba el empresario kirchnerista.

"El miércoles salió la nota de intervención de ese corredor. Intervenimos el corredor Ezeiza Cañuelas para que no haya desvío de fondos en el día a día", dijo ayer el funcionario en Radio Mitre.

El ministro sostuvo que la empresa no cumplió con sus obligaciones y adeudaba "recursos de asignación específica" a Vialidad Nacional. Contó que del peaje que paga la gente, una parte va para la empresa y otra debe ir a ese organismo. "Y la concesión no estaba pagando esto. Son unos $250 millones que, más intereses, llega a $ 400 millones (lo que no se pagó)", dijo Dietrich.