Una gendarme murió al caer del vagón de un tren en asalto

Un violento episodio ocurrió cerca de las 8.30, en la localidad de bonaerense de Carapachay, donde una gendarme, identificada como Cecilia Maldonado (28), cayó desde el cuarto vagón del tren al andén y murió.

Según informó la policía que trabajó en el lugar, la víctima quedó tendida malherida de un golpe en la cabeza y fue asistida por personal de la Policía Federal que custodiaba el lugar.

No obstante, añadieron los voceros, Maldonado murió antes de llegar a ser trasladada a un centro asistencial.

Los investigadores procuraban establecer las circunstancias de la muerte y tomaron testimonios a las personas que estaban en ese momento en la estación, entre los cuales figura una mujer que aseguró haber visto a la gendarme caer y a dos personas correr por el andén en la misma dirección en la que se dirigía el tren.

Por tal motivo, la pesquisa apunta a que la mujer, que estaba vestida de civil, fue víctima de un intento de robo a bordo de la formación y que pudo haber sido empujada por delincuentes cuando se resistió.

De hecho, la mochila que llevaba Maldonado, con todas sus pertenencias en su interior, fue hallada a bordo del tren, cuando se detuvo en la siguiente estación, Villa Adelina.

Regresaba a la casa

De acuerdo a la información policial, la gendarme regresaba a su casa tras prestar servicios en Tecnópolis, lugar donde había dejado su arma reglamentaria y su uniforme guardado en un locker.

Si bien en la estación hay cámaras de seguridad, no hay una que apunte específicamente a ese sitio, por lo que la Justicia dispuso el secuestro de las filmaciones para analizarlas con detenimiento en busca de algún rastro que le permita avanzar en la investigación.

La causa está a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción Vicente López Oeste, quien delegó diversas diligencias a los policías de la seccional sexta de ese partido bonaerense.

Vecinos de la zona de Carapachay denunciaron ante la prensa que los robos y arrebatos son habituales en esa estación y aseguraron que no hay seguridad ni policías para protegerlos.

El 15 de febrero pasado un hombre murió arrollado por un tren del que se había bajado porque le robaron celular.