Analistas estiman que la lucha contra la inflación sigue siendo un desafío

Mientras el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, aseguró que la inflación "ya no es un tema" y, si bien admitió que no saben a cuánto llegará en 2016, afirmó que "no será del 45 por ciento", distintos economistas consultados por EL LIBERAL estiman que aún "no es un tema cerrado" ya que hay varios desafíos que tiene por delante la economía.

En primer término, el economista Camilo Tiscornia, en diálogo con EL LIBERAL, coincidió con Prat Gay en que "en agosto el dato de inflación va a ser bajo, lo cual es una señal muy positiva. Pero de ahí a decir que se terminó el problema de la inflación o que está bajo control es exagerado. La lucha contra la inflación va a ser un desafío, me parece que vamos por buen camino y el dato de agosto lo confirma, pero todavía falta para poder decir que el tema ya está cerrado".

Destacó que los dichos del ministro de Hacienda se inscriben en un contexto en el cual, "está generando expectativa y tiene que marcar el rumbo. Hay que pensar que una de las amenazas que hay para justamente esa lucha contra la inflación es el tema de los salarios, entonces tiene que dar esa señal para ir marcando la cancha a los sindicatos para que no intenten reabrir una paritaria en esta última parte del año. O bien, si en todo caso hay que abrirla sea en un contexto muy distinto al de una inflación del 40%".

Según su análisis, este año la inflación "estará en torno al 38% de diciembre a diciembre. Hacia el año próximo baja en torno a 20%, pero veremos si se llega a la meta del Banco Central que tiene entre 14 y 17% para el 2017. No creo que sea imposible de lograr, un 20% sería más factible de diciembre a diciembre, pero el promedio va a ser más alto".

Curia

El economisa Eduardo Curia, en diálogo con EL LIBERAL, indicó que "no me animaría a dar por cerrado el tema de la inflación, como que es un tema que está todo encauzado".

En cambio, dijo que "sí, acepto, que hay una declinación de la inflación, pero no sé si el partido termina allí. Porque está la cuestión fiscal que a la postre tiene cierta incidencia y no sabemos si habrá otros elementos de costos o parecidos que comiencen a ejercer presión sobre los precios".

Apuntó que "la sensación es que entramos en una fase de declinación visible de inflación donde algunos pueden decir que es por el efecto diferido de la política monetaria severa y otros porque han cesado los ajustes de costos y precios relativos".

A su turno, el economista Aldo Abram opinó que si bien la necesidad política de bajar la inflación está siendo superada, "la parte más preocupante es lo que está planteado en las expectativas sobre el nivel de actividad. Lo otro preocupante es la parte fiscal, pero hoy la necesidad política mayor era la inflación y ahora resta levantar el nivel de actividad". l