Proveen pruebas contra un distribuidor que trabajaría para Canido

Los pobladores de Bajo Hondo, Juan Felipe Ibarra, proveerán hoy a la Justicia documentos con las patentes de las dos camionetas en que se movilizaba la docena de sujetos armados. "El sábado prendieron fuego una carpa, mataron a cuatro animales e hirieron de bala a Pedro Campos", reveló María José Venancio, integrante del equipo jurídico del Mocase vía Campesina.

El epicentro del grave incidente fue un predio de 4.000 hectáreas, distante 80 kilómetros de Quimilí, Moreno, y 200 de la capital santiagueña.

Allí, numerosos encapuchados irrumpieron en dos camionetas: "Envenenaron el pozo de agua, dañaron la radio policial, atropellaron a una persona e hirieron a otra y se fueron".

Investigación

Según la abogada, de las chapas patentes "se desprende que pertenecen a un distribuidor de gaseosas Manaos en el departamento Moreno".

Amplió: "Ello será entregado este lunes al juez Darío Alarcón".

Añadió la letrada que todas las denuncias conducen al empresario Orlando Canido, dueño de Manaos.

"El empresario dice tener títulos por 1.800 hectáreas. Hasta ahora, no se hizo ningún juicio civil que demuestre tal condición".

Detalló: "Sólo en Bajo Hondo sostiene ser propietario de 1.800 hectáreas. Sabemos que otras también se encuentran en Huachana (Alberdi) y también en el Lote 5 de Quimilí", departamento Moreno.

Explicó que debido a un conflicto reciente, fue denunciado ante la jueza Rosa Falco y debe presentarse a declarar.

Custodia policial

Después del incidente, Alarcón envió a una comisión de efectivos del Cuerpo Guardia de Infantería, quienes ayer montaron una sutil vigilancia en la zona.

Como los agresores "actuaron" encapuchados, se tornaba compleja su identificación, pero igual la policía hizo rastrillajes.

En base a la descripción de las camionetas, el juez ordenó su búsqueda, pero hasta anoche no habían obtenido resultados positivos en las tareas.

También, se sabe que el herido se encuentra fuera de peligro y hoy ya recibiría el alta médica, una vez que le sea extraído el plomo del pie.