Richard Gere viajó en misión solidaria

Es la tercera vez que el protagonista de "Mujer bonita" visita el Festival de Cine de San Sebastián, pero en esta ocasión lo hizo con una misión solidaria, para respaldar el trabajo de la Fundación Rais, que tiene como madrina justamente a su novia, la gallega Alejandra Silva, y que ayuda a gente en situación de calle.

En una conferencia de prensa posterior a su visita a esa fundación, Gere recordó una anécdota sobre el rodaje de la película "Invisibles", dirigida por Over Moverman e incluida en el festival en una función especial, que da cuenta hasta qué punto las personas en situación de calle pasan inadvertidas para la mayoría de la gente.

"Este personaje creo que ya estaba en mi interior desde hace muchísimo tiempo. Tardé 12 años en desarrollar este proyecto, porque quería que fuera algo importante y no una película superficial".

"No tenía clara cuál era la profundidad de la cuestión hasta que empecé a rodar en las calles de Nueva York", recordó el actor, quien encarna en el filme a un hombre, desesperado, que vagabundea en busca de comida y un techo para resguardarse del frío, mientras espera recuperar la relación con su hija, de la que está distanciado.

Gere recordó que un día le tocó filmar una escena en una plaza céntrica de Manhattan y que, a pesar de que estaba caracterizado y un poco maltrecho en su aspecto, tenía la ilusión de que algún peatón lo reconociera cuando pasara a su lado.

"Nadie me prestó atención. Estuve parado allí durante 45 minutos y nadie me miró a los ojos, nadie. Eso me hizo pensar que la gente no quiere conectar con las personas que viven en la calle. Fue la primera vez que me sentí invisible. Si esto me sucede a mí, imaginen cómo será para alguien que no tiene ni mi fama ni mi posición social", advirtió preocupado.