Hotelero y su hijo, acusados de balear a remisero y dejarlo al borde de la muerte

LAS TERMAS, Río Hondo (C) Un hombre se encuentra internado con pronóstico reservado y lucha por su vida en la sala de terapia intensiva del Hospital Regional tras ser herido de bala con una escopeta y recibir una herida punzo-cortante en la región del tórax, en un confuso episodio que se registró en las últimas horas del martes en la calle Canal de Beagle casi Güemes del barrio Jardín.

El herido fue identificado como Pablo Palavecino (38), un conocido remisero que hace viajes a Capital. Según fuentes policiales, antes del hecho de sangre cerca de las 21, Palavecino se encontraba con su pareja Verónica Juárez (32) y su suegro. En ese momento una pareja en una moto fue a verlo al herido y terminaron discutiendo. El conductor del rodado amenazó que lo iba a "matar de un tiro" y se retiró del lugar.

Más tarde Palavecino se dirigió a su casa en su Chevrolet Astra. Desde un automóvil en el que se trasladaban dos personas de sexo masculino lo atacaron y recibió dos balazos cuando descendía de su vehículo. Una vecina del barrio habría observado el hecho, pero no pudo identificar a los agresores.

Producto de los impactos de bala, la víctima quedó en el suelo hasta que llegó al lugar el Servicio Municipal de Emergencia que lo trasladó en forma urgente Hospital Zonal "Emilio Mera".

Cuando arribó a la guardia del nosocomio el médico constató que Palavecino había sufrido una herida de arma de fuego a la altura del tórax lado derecho sin orificio de salida, por lo que el Dr. Pérez Monjaraz decidió derivarlo urgente al Hospital Regional.

Testigos dejaron trascender que cuando Palavecino se encontraba tendido en el suelo continuó siendo agredido y habría recibido una herida punzo penetrante en la región del tórax.

Los datos que recopiló la policía para individualizar a los sospechosos los puso en conocimiento de la fiscal de turno, la Dra. Susana Santillán quien acompañó a los uniformados hasta a un hotel de la ciudad propiedad del supuesto autor, Luis Lastra.

Empleados del hotel les informaron que Lastra no se encontraba, y que éste se había retirado desde hacía varias horas, pero el auto donde se había movilizado -un Toyota Corola Gris- se encontraba en el lugar. La representante del Ministerio Público ordenó que requisaran el rodado. Allí encontraron un celular en la guantera que fue secuestrado, pero no descubrieron ningún tipo de arma.

La hipótesis de que fue Lastra el autor de los disparos ganó trascendencia cuando averiguaron que éste habría tenido una relación sentimental con Verónica Juárez. La mujer habría terminado con Palavecino y se unió a Lastra. Pero después de un tiempo finalizó su relación con el dueño del hotel y regresó nuevamente con la víctima.

Posteriormente la Dra. Santillán dispuso una orden de aprehensión para los acusados, quienes se encontraban escondidos dentro del hotel. Luis Lastra y su hijo fueron detenidos más tarde.