Dolar Oficial: - Dolar Blue:- Dolar CCL:- Dolar Bolsa: - Dolar Mayorista: -

EL LIBERAL . El Evangelio

Evangelio según San Juan 16,29-33.

28/05/2017 21:25 El Evangelio
Escuchar:

Evangelio según San Juan 16,29-33. Evangelio según San Juan 16,29-33.

Los discípulos le dijeron a

Jesús: “Por fin hablas claro y

sin parábolas.

Ahora conocemos que tú

lo sabes todo y no hace falta

hacerte preguntas. Por eso

creemos que tú has salido de

Dios”.

J e s ú s l e s re s p o n d i ó :

“¿Ahora creen?

Se acerca la hora, y ya ha

llegado, en que ustedes se

dispersarán cada uno por su

lado, y me dejarán solo. Pero

no, no estoy solo, porque

el Padre está conmigo.

Les digo esto para que

encuentren la paz en mí. En

el mundo tendrán que sufrir;

pero tengan valor: yo he vencido

al mundo”.

Comentario

Estamos ya a punto de

terminar el tiempo pascual.

Tanto que ahora ya la mirada

de la liturgia ya no se dirige

hacia atrás (meditar e interiorizar

la resurrección de

Jesús) sino hacia delante: la

gran fiesta de Pentecostés, la

venida del Espíritu Santo, que

llenará de gozo nuestras celebraciones

del próximo domingo.

El Espíritu Santo es el

gran tema de la semana.

De eso va la primera lectura.

Aquella primera iglesia

iba creciendo poco a poco.

No estaban las normas

ni los caminos escritos. En

aquel tiempo se hacía camino

al andar, se aprendía sobre la

marcha. La memoria de Jesús

era el gran faro orientador de

lo que iban haciendo los discípulos.

A cada paso que daban

se encontraban con nuevas

situaciones, con personas

diferentes. Y tenían que

ir dando respuesta. Siempre

desde la memoria del Señor

Jesús.

En esta primera lectura,

Pablo se encuentra en una

ciudad nueva. Nuevas gentes

a las que predicar el Evangelio.

O no tan nuevas. Algunos

ya habían oído algo. Con

la distancia confundían a Jesús

con Juan Bautista. Hay

que hablarles de Jesús. Hay

que explicarles que Jesús es

aquél al que el mismo Bautista

anunció, que hay un bautismo

nuevo, ya no de conversión

sino del Espíritu.

Lo más interesante de esta

lectura es que se invierte

el orden de los factores a

que estamos acostumbrados.

Nosotros ponemos primero la

catequesis y luego el sacramento.

Al menos, así lo hacemos

con los adultos. Primero

se les da una larga catequesis

y luego, cuando se estima

que están preparados, se

les imparte el sacramento del

bautismo, se les acoge en la

comunidad cristiana.

Pablo hace exactamente

lo contrario. Lo primero, es

bautizarlos en el nombre de

Jesús e imponerles las manos.

Ahí ya se hizo presente

la fuerza del Espíritu. Luego,

Pablo se dedicó a la catequesis.

A los que había bautizado

y a los demás que querían escuchar.

Tres meses se dedicó

a hablar con libertad del reino

de Dios.

Lo que debes saber
Lo más leído hoy