Comerciante mató a presunto ladrón y quedó aprehendido

Un comerciante se enfrentó a tiros con un grupo de delincuentes que intentaron robar su local y mató a uno de ellos. El hecho ocurrió en la avenida San Ramón al 800, en el barrio San Ramón de San Miguel de Tucumán.

El presunto ladrón, identificado como Roque Eduardo Santos, (35), y con antecedentes penales, recibió varios tiros, tres de los cuales le hicieron impacto en el pecho, la espalda y en su pie izquierdo, provocándole la muerte prácticamente en el acto.

Según datos aportados por la Justicia publicados por La Gaceta, el dueño del local -de quien no trascendió su identidad- descubrió que había gente adentro de su negocio y que le estaban robando. Cuando salió tras el grupo de delincuentes, dio la voz de alto, ante lo cual los sospechosos hicieron caso omiso y empezaron a dispararle.

Según contó el comerciante a los policías, él respondió también con varios tiros, los cuales hicieron impacto mortalmente contra uno de ellos.

El autor de los disparos quedó aprehendido en la comisaría 10ª de San Miguel de Tucumán mientras se investigan los hechos.

Polémica

Ante esta situación, la polémica volvió a instalarse en la sociedad argentina, ya que la duda es si el comerciante actuó en "legítima defensa" o si su reacción fue realmente un asesinato.

Un caso paradigmático, con características bastante parecidas y que tuvo gran repercusión nacional, ocurrió en agosto del año pasado en Loma Hermosa, partido bonaerense de San Martín. En esa oportunidad, el médico Lino Villar Cataldo salía de su oficina y estaba a punto de subirse a su Toyota Corolla cuando Ricardo "Nunu" Krabler, armado y con dos cómplices, lo interceptó para robarle el auto, pero no pudieron hacerlo arrancar, lo que generó la reacción del propietario.

En pocos minutos se efectuaron los disparos y se escucharon los gritos del profesional. "Me pegaron, me pegaron", sostuvo el hombre de 61 años. Soltó el arma con la que le disparó al ladrón y esperó la ambulancia.