"Estoy rezando por la Diócesis de Santiago del Estero"

Monseñor Francisco Polti, el obispo de la Diócesis de Santiago del Estero, se encuentra en medio del encuentro mundial que convocó a más de 20 mil argentinos, y en diálogo exclusivo con EL LIBERAL, dio gracias al Señor “por lo que hace por los jóvenes” y dijo estar rezando por todos los santiagueños.

¿Cómo vive esta Jornada Mundial de la Juventud Río 2013?

Muy bien. Como habrán visto ustedes, hoy (por anoche) hemos tenido un muy buen inicio (20 mil jóvenes argentinos) en la Catedral de Río de Janeiro. Con esta llegada del Papa y este pasaje fugaz por la Catedral de Río, los corazones se han encendido. Empezamos esta Jornada Mundial de la Juventud con mucha alegría, con deseos de que todos nos convirtamos al Señor e intentar vivir lo que Dios nos pide a cada uno de nosotros, porque a cada uno nos pide que nos vayamos al cielo por un camino concreto. Es esto lo que le tenemos que decir que sí al Señor y el papa Francisco, seguro, nos va a recordar las cosas que tenemos que vivir. Estoy rezando por la Diócesis de Santiago.

¿Qué le responde su corazón cuando ve manifestaciones de fe como la vivida en la Catedral de Río?

Doy gracias a Dios por tantas cosas que le ha hecho ver Dios a uno. Por otra parte, también estoy pidiendo por los jóvenes para que esto no sea efímero sino que luego se conserve y se robustezca para que así, poco a poco podamos formar, como decía monseñor Arancedo, una Argentina nueva.

¿Saldrán de aquí discípulos misioneros, como se pidió en Aparecida en el 2007 y ahora es el leit motiv de estas jornadas?

Lo que ha hecho Aparecida es renovar las enseñanzas de la Iglesia. Desde el bautismo, nosotros, tenemos como el derecho de ir al cielo, y eso es ser discípulo y de anunciar esto a todo: eso es ser misionero. Es renovar de una manera nueva lo que tenemos desde el bautismo, desde el primer momento en que Cristo nos dijo: “Enseñen a todas las naciones”. Me parece muy bien que nos recuerden de una manera nueva, pero que lo tengamos presente para vivirlo todos, ya sea en nuestro hogar, en nuestro lugar de trabajo, cuando hacemos deportes, cuando nos divertimos o asistimos a una misa. Siempre, siempre estamos siendo discípulos, que demos ejemplos y que se acerquen a Dios.

Con un Papa como Francisco, ¿ese mensaje llegará de la manera que Cristo lo quiere?

Es por eso que estamos intentando seguir las enseñanzas del Santo Padre. Tratemos de leer lo que él dice y de llevarlo a la práctica para así vivir lo que él está esperando de nosotros en esta Iglesia de la Argentina y de Santiago del Estero.