ENCUENTROS

Actos y ceremonias secretas

En la mayoría de sus encuentros y actos en los que abundan los símbolos y alegorías (muchos de ellos presentes en la arquitectura de edificios y construcciones en Santiago del Estero), los masones intentan modernizarse ofreciendo una imagen de mayor apertura ante la comunidad a la que dicen servir, aunque siguen adhiriendo a una serie de prácticas que históricamente han sido secretas y así permanecen hasta nuestros días, como la ceremonia de iniciación de los nuevos miembros.

La máxima autoridad de los masones en la Argentina, el Gran Maestre Ángel Jorge Clavero, titular de la Gran Logia de la Argentina de Libres y Aceptados Masones, explicó que sus normas les impiden a los masones darse a conocer como tales en público y sus nombres sólo son conocidos después de muertos.

“Por reglamentación interna, sólo el Gran Maestre es el que habla ante la sociedad”, explicó Clavero, aunque también él mismo puede disponer “que algún otro hermano (miembro de la logia) lo haga cuando así haga falta”.

“La masonería no es secreta, sino que mantiene una suerte de discreción ante los demás, y para ser más ameno. Tenemos la misma discreción que puede tener una sociedad anónima cuando se reúne el directorio. A usted no lo dejan entrar, e incluso no lo dejan entrar a una reunión de consorcio si no tiene un departamento en ese edificio”, ejemplificó.
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