Presencia santiagueña en siete provincias y la Capital Federal
EL BSE ya desembarcó en Córdoba, Salta, Catamarca, La Rioja, Tucumán y LO HARÁ PRÓXIMAmente EN Jujuy, a lo que se suma Capital Federal y Santiago del Estero. Se encuentra en análisis nuevas incursiones que lo posicionarán definitivamente como banco nacional. La dinámica empresaria de sus autoridades es reconocida por el empuje y espíritu emprendedor.
El Banco Santiago del Estero tiene una clara visión empresaria, que ha definido a la expansión regional como uno de sus pilares de crecimiento, en el convencimiento de que su desarrollo debe realizarse sobre bases sólidas, que eviten inconvenientes propios de la improvisación.
Su presencia en las provincias del NOA, se ha ido consolidando mediante un meticuloso plan de inversiones, que fue descubriendo oportunidades que se tradujeron en fortalezas. No son simples sucursales que buscan maquillar una representación de compromiso. Se trata de una decidida consolidación de un generador de negocios locales, que busca potenciar su desarrollo a medida que se presenten las circunstancias adecuadas.
En cada provincia, el BSE se adapta a las necesidades culturales y empresariales del lugar, creando una empatía que abre las puertas del intercambio productivo. Sin embargo hay características propias que lo identifican y que lo hacen sobresalir por sobre la competencia.
Los Centros de Pagos orientados hacia los jubilados y pensionados son únicos en el país, tanto por su confort edilicio, su tecnología, como por la calidez en la atención. Se han convertido en un sello propio valorado por las autoridades gubernamentales y fundamentalmente por las organizaciones de jubilados con quienes se interactúa permanentemente.
Esto quedó demostrado en la última inauguración de la sucursal Salta donde el presidente del Centro de Jubilado, José Felipe Palacios reconoció que “estamos ante una obra que sin dudas fue ejecutada para servir y atender a los adultos salteños y eso a nosotros nos enorgullece”.
Otra caractarística propia que identifica al BSE es el trabajo conjunto con la Tarjeta Sol, que no se ofrece en forma separada como si fuera una marca adosada al banco, sino que es protagonista principal de su carteras de clientes, logrando interactuar del tal forma que comerciantes y clientes identifiquen a la tarjeta con el banco y viceversa. No hay una tarjeta Sol de otro banco que no sea el BSE, a diferencia de los plásticos nacionales o internacionales que se expenden en distintas entidades. Ello le garantiza a los clientes un compromiso empresarial que trae grandes beneficios.
Santiago del Estero se expande así hacia el país, de la mano de una empresa claramente representativa de su idiosincrasia, recibiendo gestos de admiración y reconocimiento.
Su presencia en las provincias del NOA, se ha ido consolidando mediante un meticuloso plan de inversiones, que fue descubriendo oportunidades que se tradujeron en fortalezas. No son simples sucursales que buscan maquillar una representación de compromiso. Se trata de una decidida consolidación de un generador de negocios locales, que busca potenciar su desarrollo a medida que se presenten las circunstancias adecuadas.
En cada provincia, el BSE se adapta a las necesidades culturales y empresariales del lugar, creando una empatía que abre las puertas del intercambio productivo. Sin embargo hay características propias que lo identifican y que lo hacen sobresalir por sobre la competencia.
Los Centros de Pagos orientados hacia los jubilados y pensionados son únicos en el país, tanto por su confort edilicio, su tecnología, como por la calidez en la atención. Se han convertido en un sello propio valorado por las autoridades gubernamentales y fundamentalmente por las organizaciones de jubilados con quienes se interactúa permanentemente.
Esto quedó demostrado en la última inauguración de la sucursal Salta donde el presidente del Centro de Jubilado, José Felipe Palacios reconoció que “estamos ante una obra que sin dudas fue ejecutada para servir y atender a los adultos salteños y eso a nosotros nos enorgullece”.
Otra caractarística propia que identifica al BSE es el trabajo conjunto con la Tarjeta Sol, que no se ofrece en forma separada como si fuera una marca adosada al banco, sino que es protagonista principal de su carteras de clientes, logrando interactuar del tal forma que comerciantes y clientes identifiquen a la tarjeta con el banco y viceversa. No hay una tarjeta Sol de otro banco que no sea el BSE, a diferencia de los plásticos nacionales o internacionales que se expenden en distintas entidades. Ello le garantiza a los clientes un compromiso empresarial que trae grandes beneficios.
Santiago del Estero se expande así hacia el país, de la mano de una empresa claramente representativa de su idiosincrasia, recibiendo gestos de admiración y reconocimiento.