Testigo afirmó que no hubo una discusión previa a los mortales balazos de Cascio
Se lo dijo el cabo Diego Ledesma, único efectivo que presenció el feroz ataque que terminó con la vida del comisario Eduardo Bravo, a la fiscal María Eugenia Carabajal. Dos mujeres policías lograron salvar su vida arrojándose por una ventana. Todos los involucrados están bajo tratamiento psicológico.
No hubo discusión antes de los disparos. Esa es la premisa con la que hoy se manejan en la Justicia. En diálogo exclusivo con EL LIBERAL, la Dra. María Eugenia Carabajal, fiscal que interviene en la causa del “tirador de Criminalística” sostuvo que tras la primera entrevista con uno de los testigos la información que surgió es que “aparentemente no hubo discusión ni intercambio de palabras” antes de que Marcelo Cascio abriera fuego contra su ex jefe, el comisario Eduardo Bravo.
Además la fiscal y el magistrado Ramón Tarchini Saavedra fueron a visitar al cabo de policía que fue dado de alta y permanece en su hogar con licencia médica, hasta tanto se recupere del disparo que recibió en la pierna por parte de Cascio.
“Ayer le recibieron el testimonio a Ledesma pero en sede policial, el expediente no ha sido aún remitido al Juzgado (de Segunda Nominación)”, informó la representante del Ministerio Público.
“Nos hemos apersonado con Su Señoría hasta el domicilio del cabo Ledesma, queríamos interiorizarnos de algunas cosas. Cómo habían sido los hechos, queríamos que se esclarezca todo, para poder realizar una reconstrucción histórica precisa de los hechos”, sostuvo Carabajal.
“Pero -aclaró- lo que más nos preocupaba y fue el motivo principal de la visita era saber cuál era su estado de salud, queríamos saber cómo estaba y cómo marchaba su recuperación”.
La fiscal informó que el perito le refirió que se encontraba bien y que su herida sanaba de acuerdo con lo previsto por los médicos que lo habían atendido.
“Sin mediar palabras”
La causa se encuentra bajo estricto secreto de sumario, pero las versiones policiales y las que fueron difundidas por los distintos testigos indicaban que había habido una discusión previa entre el presunto agresor y el comisario asesinado.
Se habló de diferencias previas y de pericias que implicaban a los familiares de los protagonistas, pero Ledesma habría tirado por tierra todas esas elucubraciones con el testimonio brindado ayer.
Pese al hermetismo, la fiscal deslizó que según la versión de Ledesma el único presente al momento de los disparos, la balacera habría empezado sin mediar palabras por parte de Cascio.
“No puedo dar demasiadas precisiones por el estado de la causa, pero aparentemente no habría habido ninguna discusión ni intercambio de palabras”, dijo la fiscal y dio por terminada la entrevista que concedió ayer por la mañana para referirse a la causa y aclarar varios transcendidos.
El Dr. Tarchini Saavedra tras haber visitado a Ledesma decidió que el cabo de policía reciba contención de un profesional en salud mental que lo ayude a superar la difícil situación que le tocó vivir. “Su Señoría ha dispuesto que tenga ayuda psicológica por la situación que ha sufrido”, concluyó Carabajal. l
Además la fiscal y el magistrado Ramón Tarchini Saavedra fueron a visitar al cabo de policía que fue dado de alta y permanece en su hogar con licencia médica, hasta tanto se recupere del disparo que recibió en la pierna por parte de Cascio.
“Ayer le recibieron el testimonio a Ledesma pero en sede policial, el expediente no ha sido aún remitido al Juzgado (de Segunda Nominación)”, informó la representante del Ministerio Público.
“Nos hemos apersonado con Su Señoría hasta el domicilio del cabo Ledesma, queríamos interiorizarnos de algunas cosas. Cómo habían sido los hechos, queríamos que se esclarezca todo, para poder realizar una reconstrucción histórica precisa de los hechos”, sostuvo Carabajal.
“Pero -aclaró- lo que más nos preocupaba y fue el motivo principal de la visita era saber cuál era su estado de salud, queríamos saber cómo estaba y cómo marchaba su recuperación”.
La fiscal informó que el perito le refirió que se encontraba bien y que su herida sanaba de acuerdo con lo previsto por los médicos que lo habían atendido.
“Sin mediar palabras”
La causa se encuentra bajo estricto secreto de sumario, pero las versiones policiales y las que fueron difundidas por los distintos testigos indicaban que había habido una discusión previa entre el presunto agresor y el comisario asesinado.
Se habló de diferencias previas y de pericias que implicaban a los familiares de los protagonistas, pero Ledesma habría tirado por tierra todas esas elucubraciones con el testimonio brindado ayer.
Pese al hermetismo, la fiscal deslizó que según la versión de Ledesma el único presente al momento de los disparos, la balacera habría empezado sin mediar palabras por parte de Cascio.
“No puedo dar demasiadas precisiones por el estado de la causa, pero aparentemente no habría habido ninguna discusión ni intercambio de palabras”, dijo la fiscal y dio por terminada la entrevista que concedió ayer por la mañana para referirse a la causa y aclarar varios transcendidos.
El Dr. Tarchini Saavedra tras haber visitado a Ledesma decidió que el cabo de policía reciba contención de un profesional en salud mental que lo ayude a superar la difícil situación que le tocó vivir. “Su Señoría ha dispuesto que tenga ayuda psicológica por la situación que ha sufrido”, concluyó Carabajal. l