Hiperquinético no es igual a "indisciplinado"
La hiperquinesia es distinta al mal comportamiento o la simple inquietud.
En la hiperquinesia el niño no puede controlar su comportamiento, y más importante, no puede terminar lo que emprende, ni siquiera es capaz de jugar solo o en grupo.
Esto provoca rechazo en adultos y amigos, y por eso algunos hiperquinéticos son niños en conflicto y poco felices. Se inicia el mismo, por lo general, alrededor de los dos o los tres años e incluso antes, pero resulta incómodo y manifiesto al comienzo de la escolaridad.
La descripción de estas conductas es bastante característica.
El niño se distrae con cualquier tipo de impresión por irrelevante que sea, y es imposible hacerle mantener la atención. Consecuencia lógica, la escolaridad y el aprendizaje se resienten seriamente.
“Hay que diferenciar porque el niño con un déficit antencional es un niño que molesta porque no le interesa lo que está viendo, por lo que comienza a complicar la clase porque no le interesa, pero el hiperquinético está conectado y le interesa lo que escucha por eso puede contestar cuando le preguntan hasta que llega el momento en el que si no es tratada su hiperquinesia también puede llegar a no importarle la clase”, explicó la psicopedagogo, licenciada Ana Gálvez.l
En la hiperquinesia el niño no puede controlar su comportamiento, y más importante, no puede terminar lo que emprende, ni siquiera es capaz de jugar solo o en grupo.
Esto provoca rechazo en adultos y amigos, y por eso algunos hiperquinéticos son niños en conflicto y poco felices. Se inicia el mismo, por lo general, alrededor de los dos o los tres años e incluso antes, pero resulta incómodo y manifiesto al comienzo de la escolaridad.
La descripción de estas conductas es bastante característica.
El niño se distrae con cualquier tipo de impresión por irrelevante que sea, y es imposible hacerle mantener la atención. Consecuencia lógica, la escolaridad y el aprendizaje se resienten seriamente.
“Hay que diferenciar porque el niño con un déficit antencional es un niño que molesta porque no le interesa lo que está viendo, por lo que comienza a complicar la clase porque no le interesa, pero el hiperquinético está conectado y le interesa lo que escucha por eso puede contestar cuando le preguntan hasta que llega el momento en el que si no es tratada su hiperquinesia también puede llegar a no importarle la clase”, explicó la psicopedagogo, licenciada Ana Gálvez.l