RECONSTRUCCIÓN PERIODÍSTICA DEL HECHO

Del viaje en bici a la represa, al ataque sexual, muerte y abandono en un basural

Entre el 31 de mayo y el 2 de junio, los homicidas generaron desazón y pánico en familiares y vecinos. El cuerpo mutilado de Marito Salto fue hallado dentro de bolsas, y con perros disputándoselo.

"Todos los días veo la foto de Marito. Él me da energías, motivación, bronca, para salir a buscar a los que hicieron esto. Y no voy a descansar…" Las palabras son de uno de los policías que trabaja desde el 2 de junio. Ya perdió la cuenta de las hipótesis chequeadas y descartadas. Y de los cientos de kilómetros recorridos en autos, camionetas y motos. Un equipo periodístico de EL LIBERAL y Canal 7 reconstruyeron los últimos momentos de Marito, antes de que se desatara la tragedia. Desde su casa, el adiós a su madre, el paso con la bicicleta rumbo a la represa, la llegada y su desaparición. Cómo fue Según la investigación, Marito salió de su casa el 31 de mayo a la siesta, entre las 14 y las 15. Pedaleó 450 metros, hasta llegar a la ruta 89. De ahí, recorrió un kilómetro y medio hasta arribar a la rotonda de Quimilí, su imagen quedó registrada en cámaras de seguridad de la comuna. Luego, el niño con su caña de pescar y un baldecito para traer los peces, anduvo otros 800 metros, hasta llegar a la represa. Se desconoce cuánt o tiempo estuvo allí. Si estuvo solo o no. Se infiere que desde ese lugar fue levantado por alguien (está sospechado de esto Rodi) o por varios y retirado hasta su terrible final. ¿Lo abusaron y mataron en un barrio o en las afueras de la ciudad? Su padre está seguro que alguna gente de los tabiques aledaños debe haber visto algo. También está seguro de que al pequeño se lo llevaron por la fuerza hasta el barrio Alomo a Las Cooperativas. Si fue asesinado en algún barrio, nadie descarta que el cuerpo haya sido trasladado y conducido por el Bº Triángulo. La otra teoría es que fuera muerto y llevado por la vera de la ruta. La búsqueda Durante dos días, una docena de policías recorrió casas y más casas, pero Marito no apareció. Recién el 2 de junio el dueño de unos cerdos tuvo la desgracia de develar una noticia que aún lo tortura, machaca, por las noches. Don Maldonado fue en auto para alimentar a sus chanchos. Detuvo la marcha en un basural (especie de chacra), junto a un campo privado de pastoreo, distante 5 kilómetros de la represa. A 50 metros de la ruta, Maldonado contempló a dos perros vagabundos destrozando una bolsa que contenía algo. Se acercó más y advirtió que el contenido era sospechoso. Alejó a los animales y al instante, descubrió el cuerpo mutilado de un niño. "Hace dos días que buscan a un chiquito", supo decirle a la policía después. "En mi interior, tenía la presunción de que se trataba del niñito perdido", agregó sobresaltado a los investigadores. .

Ir a la nota original

NOTICIAS RELACIONADAS

MÁS NOTICIAS