Filmarán indagatoria al amigo del bombero muerto de un tiro
La fatalidad se precipitó semanas atrás. Habría sido provocada en forma accidental por un joven de 16 años.
En los próximos días y la Justicia de Las Termas indagará al amigo del aspirante a bombero, Juan Capó, muerto de un disparo a la cabeza, provocado con el arma reglamentaria de un funcionario policial.
El amigo fue imputado por presunto "homicidio culposo", ya que habría gatillado el arma de fuego, mientras Capó jugaba con un play station y contemplaba, sentado, el televisor.
De acuerdo al futuro procedimiento, el fiscal Ricardo Lissi interrogará al adolescente, mientras un equipo de colaboradores filmaría el trámite.
También estarían presentes el juez Diego Vittar, la defensa y el imputado, de 16 años, precisaron voceros judiciales de Las Termas.
Capó recibió el disparo, mientras permanecía en una casa de Francisco Solano e Italia, en el Bº Herrera El Alto, propiedad de los padres del imputado.
El arma homicida sería propiedad del tío del adolescente. El hombre es cabo de la Policía y prestará declaración ante los funcionarios.
Luego del dramático momento se realizó la "prueba de parafina" a los dos jóvenes y también a un tercero que en la cocina miraba un partido de fútbol en la televisión.
Al día siguiente, la parafina dio negativo en Capó. El arma se habría encontrado limpia; sin sangre ni otra huella genética.
Según la autopsia, Capó habría recibido el tiro sentado. Su amigo estaba de pie, y quizá a 50 centímetros. El aspirante a bombero se encontraba junto a una cama en la habitación. El plomo habría ingresado a la sien a 50 centímetros; de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha. En su trayectoria, el plomo destruyó arterias y provocó un sangrado mortal. Salió por el molar.