EN ROMA

El padre Miguel Ángel Abdo concelebró la misa con el Papa en la Basílica de Santa Marta

"Fue un momento intenso la celebración y muy simple a la vez", resaltó el sacerdote santiagueño desde Roma a EL LIBERAL.

El sacerdote Miguel Ángel Abdo, párroco de Santísimo Sacramento del barrio Borges de la ciudad capital, concelebró la santa misa con el papa Francisco en la Basílica de Santa Marta en Roma. Luego de la celebración eucarística, el padre Abdo dialogó con EL LIBERAL y contó que le pidió al Papa que "rezara por nuestro pueblo argentino, para que no pierda la fe".

"Todo fue muy sencillo y tan informal, su homilía sobre la fraternidad sacerdotal era muy simple y comprensiva. Sentí como si fuera mi casa y recordé a mis ovejas sencillas del barrio Borges. Recé mucho por ellas, que son como ovejas sin pastor. También recé por mis dos familias, mis amigos y sus familias, por los enfermos, por mis amigos del Facebook y por los matrimonios", contó muy emocionado el sacerdote.

Recalcó que "fue un momento intenso la celebración y muy simple a la vez".

"La comunión eucarística fue muy emotiva, pues había en nosotros mucho deseo de recibir a Jesús Sumo y Eterno Sacerdote para afianzar nuestra vocación sacerdotal y ayudarnos a ser fieles en el servicio al prójimo por amor", subrayó el padre Miguel, que estuvo acompañado por una familia de santiagueños.

Encuentro

Cuando concluyó la santa misa, Abdo mantuvo un encuentro cercano con el Sumo Pontífice, donde le acercó sus peticiones.

"Al terminar la santa misa debimos cumplir con el protocolo, que es acercarnos a saludar al Papa y presentarnos con nombre y apellido de cada uno. Cuando me presente, le dije: ‘Soy de la Argentina, supongo que soy el primer sacerdote hipoacúsico, incardinado a la Arquidiócesis de Tucumán, pero estoy de servicio como sacerdote ‘prestado’ en la diócesis de Santiago del Estero’. El papa Francisco me contestó: ‘¡Ah, Santiago! Mejor ahí, mejor. Y también me dijo: ‘Estás en el lugar de muuuuucho calor’. Y nos reímos juntos", contó anecdóticamente.

El sacerdote también le expresó a Francisco su felicidad "por colaborar en la Diócesis con monseñor Vicente Bokalic a la cabeza". Luego el sacerdote santiagueño le pidió al Papa que "rezara por nuestro Pueblo argentino, por todos, para que no pierda la fe’. Me dijo ‘Si, sí’. Tan simple y concisa su gran respuesta; y me abrazó con toda su ternura y sencillez", añadió.

Por último, el padre Miguel reflexionó: "Teníamos a Juan XXIII como el Papa bueno, A Juan Pablo I como el Papa de la sonrisa, pero mi impresión respecto de Francisco es el Papa de la sencillez".

Ir a la nota original

MÁS NOTICIAS