Una enfermedad silenciosa que se puede tratar a tiempo

En la mayoría de los casos no se presenta sintomatología, de ahí la importancia de acudir con regularidad a chequeos con un oftalmólogo, después de los 40 años.

"La detección es muy importante porque es una enfermedad que altera el nervio óptico y cuanto antes podamos evitar el daño neurológico es fundamental, porque después ya es tarde", remarcó el Dr. Passone.

En cuanto a los signos, el oftalmólogo recomendó prestar atención a ojo congestivo, de color rojo, que no calma con algunas gotas; y a la visión borrosa.