Ventas de maíz aumentaron 12,4% en el primer trimestre

Los productores de maíz comercializaron 8.543.200 toneladas del cereal hasta mediados de marzo, un 12,4 por ciento más que en igual período del año anterior, cuando se negociaron 7.600.500 toneladas, informó el Ministerio de Agroindustria.

De acuerdo con el informe de la cartera encabezada por Ricardo Buryaile, “el maíz atraviesa un momento de fuerte impulso, promovido por las decisiones adoptadas por el Gobierno Nacional en cuanto a la quita de retenciones”, que pasaron del 20 por ciento a su eliminación, además de “los cupos de exportación; y la unificación del tipo de cambio”.

Esas medidas “motivaron a que los productores aumenten la siembra a 7.300.000 hectáreas, de las cuales 5.800.000 hectáreas se destinarían a cosecha de granos, en lo que representa la mayor área histórica para el cultivo”, aseguró Agroindustria.

El reporte precisó que “actualmente se lleva cosechado un 3 por ciento del área nacional, principalmente en Entre Ríos, Santa Fe y norte de Buenos Aires”.

No obstante, indicó que “las tareas se ven interrumpidas por lluvias y excesiva humedad en el grano aunque no se reportan por ahora problemas generalizados por plagas y/o enfermedades”.

Agroindustria destacó “el aumento de las siembras tanto de maíz como de trigo, cereales tradicionales de la agricultura argentina”, lo que permitió que la campaña 2016/17 “se caracterice por una fuerte rotación de cultivos, y la utilización de fertilizantes, necesarios para fortalecer el cuidado del principal recurso productivo para la actividad, el suelo”.

Esa rotación, añadió, permite “proyectar una campaña de granos que marcará una máxima histórica de 130 millones de toneladas”.

Al respecto, la Dirección Nacional de Estimaciones Agrícolas y las delegaciones dependientes de la Subsecretaría de Agricultura iniciaron el relevamiento de los cultivos estivales para la campana 2016/2017, en el marco de la Metodología de Segmentos Aleatorios, en las distintas zonas agropecuarias del país.

Las estimaciones de la superficie cultivada, se indicó, son tomadas en cuenta por “numerosos actores socioeconómicos y políticos” que las utilizan para “planificar, reducir la incertidumbre o mejorar la asignación de recursos”.