Evangelio según San Mateo 5,38-42.
Jesús, dijo a sus discípulos:
U s t e d e s h a n o í d o
que se dijo: Ojo por ojo y
diente por diente.
Pero yo les digo que
no hagan frente al que les
hace mal: al contrario, si
alguien te da una bofetada
en la mejilla derecha,
preséntale también
la otra.
Al que quiere hacerte
un juicio para quitarte la
túnica, déjale también el
manto; y si te exige que lo
acompañes un kilómetro,
camina dos con él.
Da al que te pide, y no
le vuelvas la espalda al
que quiere pedirte algo
prestado.
Comentario
Vivir de amor, es darse
sin medida sin reclamar
ningún salario aquí
abajo.
¡Ah! doy sin contar,
es tando muy segura /
que cuando se ama, no se
calcula!
Al Di v i n o Co ra z ó n ,
desbordante de ternura, /
se lo he dado todo... corro
ligera.
No me q u e d a n a d a
más que mi única riqueza:
Vivir de amor.
Vivir de amor, es expulsar
todo temor, / todo
recuerdo de las faltas pasadas.
De mi s pecados no
veo ninguna huella, ¡en
un instante el amor lo que
quemado todo!
Llamarada divina, oh
dulce hoguera, / en tu hogar
he fijado mi estancia.
Es en tu fuego que yo
canto a mi placer (cf Dn
3,51):
“¡Vivo de amor!”...
“Vivir de amor, ¡qué
extraña locura!”
E l mu n d o me d i c e :
“¡Ah! deja de cantar, no
pierdas tus perfumes, tu
vida: sepas emplearlas
útilmente!”
Amar te, Jesús ¡qué
perdida tan fecunda!
Todos mis perfumes
son tuyos para siempre.
Quiero cantar al salir
de este mundo: “¡Muero
de amor!”
Amar es darlo todo y
darse a sí mismo.