2018: dólar calmo, inflación mayor a las metas oficiales y un crecimiento más lento

A dos semanas de finalizar el 2017, dos economistas analizaron cuáles son las perspectivas para el 2018 en diferentes aspectos tales como la situación del tipo de cambio, la inflación, el empleo, la inversión, el déficit fiscal y la política de endeudamiento que lleva adelante el gobierno nacional, para un año que no presenta un calendario electoral a nivel nacional y en un escenario en el que están en marcha una serie de reformas. Jorge Colina, economista jefe del Instituto para el Desarrollo Social de la Argentina (Idesa) y el titular de la consultora Muñoz y Asociados, Federico Muñoz, señalaron cuáles son desde sus puntos de vista, las perspectivas para el año próximo. Para Colina, al ser consultado respecto de si el dólar continuará por debajo de los $18 el año próximo, señaló: “No lo creo. Es posible que el Banco Central busque dejarlo deslizarse y logre colocarlo en el orden de los $19”. En tanto, respecto de lo que sucederá con el trabajo, agregó que “habrá un aumento del empleo asalariado privado registrado porque viene en tendencia a la suba y si la actividad económica sube el año próximo, como se espera que ocurra, esta tendencia se consolidará. Si hay reforma fiscal, que trae disminución de cargas sociales, el aumento del empleo debería incluso ser mayor”. A su vez, consultado respecto de la inflación para el año venidero, dijo que “se colocará por debajo del 20%, lo que sigue siendo un logro, pero difícilmente llegue al 12%” que es la meta prevista por el Banco Central. El endeudamiento Por su parte, respecto de si es viable continuar con la política de endeudamiento, Colina respondió que “no es viable, y el Presidente lo sabe, por eso incansablemente repite que hay que bajar déficit fiscal porque no se puede vivir todo el tiempo de fiado. Lo que pasa es que la población no tolera ajustes abruptos, y el déficit fiscal se reduce muy gradualmente. Habría que acelerar la reducción del déficit fiscal”. En cuanto a la posibilidad que el año próximo se presente como un escenario más favorable a las inversiones, dijo que “será así en la medida que se vaya consolidando una economía en crecimiento, moderado, pero creciendo, y la inflación bajando, las expectativas serán más favorables a la inversión”. El déficit fiscal Asimismo, al ser consultado sobre cuánto puede impactar en la economía la situación actual del déficit fiscal, indicó que “el déficit va bajando. Se necesite que baje a mayor ritmo. Lo que hay que hacer para ello, además del cambio en la fórmula de movilidad previsional, es una reforma más profunda en el sistema previsional (hay que revisar, por ejemplo, la regla de pensión derivada que hoy duplica las prestaciones y las fórmula de cálculo del haber inicial que toma sólo los últimos 10 años de salario cuando habría que tomar todos los años de salario aportados actualizados por inflación). También hay que revisar los casi $100 mil millones de programas nacionales de educación, salud, desarrollo social y vivienda que la Nación gasta en las provincias y que no lo corresponde gastar, ya que esas son funciones provinciales”.