SITUACIÓN

Crecen las bajas de terminales de pago electrónico en Santiago

Desde la empresa que provee a más de 6 mil comercios en toda la provincia señalan que también bajaron los montos de compra.

La crisis de ventas que viven los comercios santiagueños a partir de la caída en el consumo que a nivel nacional alcanzó un 12% en el bimestre con picos de hasta 17% en rubros como la indumentaria, comenzó a agudizarse y a verificarse este año a partir de la baja que una gran cantidad de negocios dieron a sus máquinas de pago electrónico, el cual se utiliza para el pago con tarjetas de crédito y débito.

En este sentido, Abram Nazar, gerente de la empresa Posnet a nivel local, indicó que hubo una caída sensible en las máquinas en funcionamiento, pero también reveló que la masa global de facturación detectada a través de estos aparatos cayó casi un 40%.

Además, destacó que hubo una caída importante en los montos de compra que se realizan en forma electrónica a través de los plásticos: De un promedio de $1.000 el año pasado, bajaron a $200. “Hasta fines del año pasado, el promedio de terminales nuevas que colocábamos era más o menos unas 150 al mes, no llegaban a ser 10 por día pero desde enero hasta ahora, tenemos un promedio de comercios nuevos que suman unas 70 terminales (equipos de cobro) al mes pero los retiros, los que se dan de baja, son unos 30 por mes”, señaló.

Destacó que en la mayoría de las bajas -unas 100 en los últimos 3 meses- “lo que venimos observando es que son comercios chicos que son los más castigados por la crisis. El 80% de los que se retiran son comercios chicos o que la están peleando porque son el dueño y un empleado, que por lo que vemos es el que ha sido más afectado”.

Factores Señaló además que “hay un combo de factores que influyen, pero lo que se puede ver también es el aumento de los alquileres que comentan los comerciantes, por eso hay una parte que retira la terminal porque no va a vender más pero también hay otros que llevan el negocio a su propia casa por el alquiler”. Agregó que el costo del equipo para el pago electrónico no es signficativo, ronda los $600, “pero nos marca un indicador que el comercio está mal”.

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