El insólito robo de una Ferrari valuada en más de dos millones de dólares

La policia logró encontrar el auto días después pero sigue detrás del supuesto ladrón.

La Policía alemana consiguió localizar, el pasado viernes, un raro modelo de Ferrari, el 288 GTO del año 1985, valorado en más de 2 millones de dólares, que fue robado de forma insólita por un hombre que se hizo pasar por comprador de autos clásicos. 
Según informó Deutsche Welle, los hechos ocurrieron en la ciudad de Dusseldorf, donde un hombre respondió a un anuncio de venta del coche de carreras y, fingiendo ser un potencial comprador, concretó una cita con su propietario.
De esta forma, dejaron que el hombre probara la máquina, un modelo del que apenas se construyeron 272. Fue durante ese viaje cuando ambos decidieron cambiar de asiento con el objetivo de que el supuesto comprador pudiera conducir. En cuanto se puso al volante, y mientras el dueño aún se encontraba en la acera, el falso cliente pisó el acelerador y se fue del lugar. 
A pesar de haber encontrado el coche, oculto en un garaje en el área de Dusseldorf, los agentes siguen detrás de la pista del individuo que perpetró el robo, pidiendo colaboración ciudadana para tratar de capturar a este falso comprador de clásicos.

La Policía alemana consiguió localizar, el pasado viernes, un raro modelo de Ferrari, el 288 GTO del año 1985, valorado en más de 2 millones de dólares, que fue robado de forma insólita por un hombre que se hizo pasar por comprador de autos clásicos. 

Según informó Deutsche Welle, los hechos ocurrieron en la ciudad de Dusseldorf, donde un hombre respondió a un anuncio de venta del coche de carreras y, fingiendo ser un potencial comprador, concretó una cita con su propietario.

De esta forma, dejaron que el hombre probara la máquina, un modelo del que apenas se construyeron 272. Fue durante ese viaje cuando ambos decidieron cambiar de asiento con el objetivo de que el supuesto comprador pudiera conducir. En cuanto se puso al volante, y mientras el dueño aún se encontraba en la acera, el falso cliente pisó el acelerador y se fue del lugar. 

A pesar de haber encontrado el coche, oculto en un garaje en el área de Dusseldorf, los agentes siguen detrás de la pista del individuo que perpetró el robo, pidiendo colaboración ciudadana para tratar de capturar a este falso comprador de clásicos. 


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