Balbi se juega por Fernando en la remake de una novela argentina
El intérprete graba en Miami, la historia que plantea su personaje en “100 días para enamorarse”, novela que en la Argentina emitió Telefé y que en Santiago del Estero se la vio por Canal 7.
El actor mejicano Manuel Balbi dejará de lado la adrenalina propia que le demandaban los personajes que hizo en las narcoseries “El Señor de los Cielos”, “Falsa Identidad” y “El Dragón: el regreso del guerrero”, esta última protagonizada junto con su colega argentino Sebastián Rulli.
Dejará de lado las persecuciones y las balaceras para transformarse en Fernando, profesor de un colegio secundario en “100 días para enamorarse”, la remake de la cadena Telemundo de la exitosa ficción argentina creada por Sebastián Ortega y Pablo Culell.
Las grabaciones se realizan en los estudios de Telemundo Center en Miami, en donde Balbi se encuentra y desde donde habló telefónicamente con EL LIBERAL.
La comedia, que en la Argentina protagonizaron Nancy Dupláa, Carla Peterson, Juan Minujín y Luciano Castro, trata temas como el bullying, transexualidad, diversidad en la composición de familias, homosexualidad, divorcio, drogas, alcohol, noviazgo adolescente, violencia de género, embarazo adolescente, entre otras muchas cuestiones.
-¿Cuál es el personaje que interpretará en la versión mejicana de “100 días para enamorarse”?
- Mi personaje se llama Fernando. La verdad que no sé cómo se llamó en la Argentina (Fidel y lo interpretó Michel Noher), un profesor de high school. Este profesor vivirá un renacer a sus 41 años. Empezará a conocer el concepto de la palabra amarse a sí mismo y amar en verdad a los demás. Ese personaje me llegó en un gran momento. No sé si porque yo también estoy en los 41 años y que, de alguna manera, estoy empezando a creer que sí debería dar clases. Cuando tienes la necesidad de compartir lo que sabes, entonces ya lo tengo muy en la piel y me lo pide a gritos. Lo más bonito que le puede pasar a un personaje es que sea tan, pero tan humano. Nos vamos a centrar en el éxito de este proyecto que fue la realidad en que estamos viviendo las personas en nuestras casas, en nuestras escuelas, con nuestro psicólogo. Siento que es una historia de psicoanálisis, de autoconocimiento, de libertades y de falsas libertades. Es una sed de los personajes por conocerse a sí mismos, por perdonarse, por darse permisos que se me hace fantástico hacerlo ahorita.
- ¿Cómo ve que Telemundo deje las narcoseries para darle paso a la comedia?
- Qué bueno que lo toma Telemundo porque siento que va a ser un buen equilibrio entre las narco novelas y estas historias que la gente ya está empezando a pedir a gritos. Siempre he pensado que las narcoseries tienen una fecha de caducidad, porque es un poco el pan con lo mismo. Ahora viene la era de la esperanza y la esperanza nace a partir de que la gente se autoconozca y se reconozca como personas no perfectas y “100 días para enamorarse” nos lo permite y más a Fernando, quien se da cuenta que tiene más que aprender de los jóvenes. Él es como un refuerzo, pero en realidad él va a recibir mucha ayuda emocional indirecta de parte de sus propios alumnos. Es un ser maravilloso. Llegó en el momento indicado una historia en la que puedo vivir el autoconocimiento y el amor de una forma distinta a los otros proyectos.
- Dicen que querer es poder y usted, a lo largo de su carrera, ha estado planteándose desafíos realizando diversos personajes. ¿Cómo hace ese replanteamiento existencial, si se quiere, para componer a Fernando?
- Técnicamente, no lo puedo ni pensar sino que me dejo llevar un poco. Representar a una persona que está descubriendo su sexualidad o redescubriéndose en su sexualidad no tendría por qué ser un reto. No creo que sea un reto sino, más bien, es un compromiso. Es un compromiso de hacer un personaje creíble, que pueda sentir con verdad. Este personaje no esconde nada. El compromiso real que yo tengo con este personaje es mostrarle a la gente que love is love, amor es amor, y no hay un amor más grande que autoconocerse. Es un honor poder tomar el estandarte y decir love is love. Pero, para amar a alguien más primero necesitas ser honesto contigo. Este personaje va a ser, hasta donde lo he leído, con el cual voy a caminar de la mano para enseñarle y enseñarme que amor es amor.
- Cuando uno alcanza la meta propuesta, ¿qué debe hacer para trascender y permanecer y no quedarse en la burbuja de la fama?
- El trascender es lo que más me importa, pero no como fama sino como éxito. Me interesa que trascienda el éxito de lo que te estoy dejando como actor. Si eso fue un éxito es porque fue algo positivo. Si llego a mi meta solamente por fama es difícil decir que voy a estar completo porque la fama es efímera. La fama se puede conseguir de una forma súper absurda, rápida y fácil y no necesariamente significa que estoy teniendo éxito con algo que estoy construyendo sino que estoy teniendo un impacto visual. Al trascender te recuerdan, te respetan, admiran. Probablemente no sepan nada de tu vida personal, pero al menos saben que lo que tú les mostraste tuvo un objetivo que fue entretener y también dejarles algo en sus conciencia para que lo puedan estudiar en sus casas. Trascender es que te digan que gracias a los personajes que hiciste va a creer en las leyes, de que hay personas que se sacrifican por la Justicia o que gracias a mis personajes logró encontrar la paz interior. A medida que uno haga las cosas bien, con conciencia, eso siempre va a tener una consecuencia positiva y me va a llevar a una trascendencia alejada del amarillismo y más cercana al positivismo.
Con su actuación en “José José” le rindió un tributo a su tío
Manuel Balbi valoró inmensamente la pequeña participación que tuvo en “José José: El Príncipe de la canción”, la serie basada en la vida y obra del recientemente fallecido cantante mejicano José Rómulo Sosa, y que Netflix emite su primer temporada. Allí compuso a Nacho. “A mí me hubiera encantado hacer un personaje más importante, más trascendental porque José José, en casa, significó mucho para nosotros. Conocí a José José. No era mi amigo, pero trabajé con él. Él llegó a nuestro salón de ensayo. Yo recuerdo a un tipo muy cálido, muy amoroso”, dijo, a EL LIBERAL el actor de “I love Romeo Julieta” (teatro) y en “Casi treinta” (cine).
“Fue un ser que no necesitó andar con los reflectores todo el tiempo y ser estridente. Fue un señor muy parecido a mi papá. Si yo viviera mi vida como una serie, la musicalización las haría todo el tiempo con las canciones de José José, probablemente las de Rocío Durcal, Vicky Car y de Laura Pausini. En casa la escuchaban desde que yo tengo uso de razón”, enfatizó el prestigioso intérprete nacido en Guadalajara y hoy radicado en el DF México.
“Por el hecho de formar parte de algo que llevara su nombre eso me hizo sentir muy satisfecho. Déjame decirte que con este personaje que interpreté, que fue muy cortito, yo le quise poner un sello porque hice un doble homenaje. Me basé mucho en el hermano de mi papá, que fue mi padrino. Me sentí muy satisfecho por hacerle ese homenaje, primero a mí tío, y segundo a contar la historia de José José. Mi tío era un amante de la historia de José José y de su música. Las escenas que me tocaron hacer estaban llenas de realidad. Afortunadamente, se le hizo un homenaje en vida a José José”, destacó, en su entrevista exclusiva con EL LIBERAL el también protagonista, en teatro, de “Hairspray”.
El policía malo de “El Mariachi” y su trabajo en la serie “Dios Inc.”
Si en el 2013 había revalidado sus pergaminos con la extraordinaria interpretación de su personaje en la telenovela “La Patrona”, en el 2014 fortaleció su carrera al ponerse en la piel de un villano policía en “El Mariachi”, producción de Sony Pictures Televisión basada en el filme homónimo que Robert Rodríguez dirigió en 1999. A la serie la emitió la señal AXN. “Hice de villano y yo estaba feliz porque con esta cara de escuincle (niño) tenía que hacer algo para hacer un buen villano. Hice un villano muy padre (muy bueno) y real. El Mariachi fue mi primera serie como tal. Y estaba emocionado por haber trabajado aquí con Martha Higadera que la conocí cuando éramos chicos y nunca habíamos trabajado. Luego, hice “Dios Inc.”, la serie de HBO (interpretó a David Cohen). Allí fue meterme en lo escabroso del negocio de la religión”, resaltó.
Trascendencia de su labor en la televisión latinoamericana
Manuel Balbi nació en Guadalajara (México) el 13 de marzo de 1978. Es reconocido por sus trabajos en la televisión latinoamericana. Comenzó sus estudios actorales en San Luis Potosí a los 16 años en un taller de acrobacia y como utilero en un taller de teatro del Instituto Mexicano del Seguro Social en la capital potosina.
En 1996, a los 18 años, se trasladó a México, tras ser aceptado en la escuela de actuación de la empresa de telecomunicaciones Televisa, el Centro de Educación Artística (CEA).
Durante tres años, estudió, ya de manera profesional, actuación. Tomó clases de teatro, televisión, análisis cinematográfico y de texto, historia del teatro, psicología, estilos de baile, jazz, clásico y vocalización. Reconocidos actores como Rosa María Bianchi, Salvador Sánchez (actor) y Flora Dantus fueron sus maestros.