ESPECIAL PARA EL LIBERAL

Día del Padre: qué vino regalarle según sea baby boomer, generación X o millennial

Un vino es un regalo con el que se dicen muchas cosas. Cuando uno elije una botella para obsequiar, en parte interpreta al agasajado, por lo que tener en cuenta el estilo y sus gustos es primordial.

Cada vez se estila más regalar vinos. Es, de hecho, un obsequio que todo el mundo disfruta de una manera u otra. Ya no importa si el agasajado sabe mucho, si tiene muchos ejemplares en su cava o si recién se está iniciando en el mundo del vino; cuando se obsequia un vino se dicen muchas cosas, ya que detrás de la etiqueta elegida hay una interpretación del agasajado. Es como si la botella expresara “esto lo compré para vos, pensando en forma de ser y en tus gustos personales”.

El Día del Padre es una de esas fechas en las que no solo los hijos obsequian a sus padres, también regalan las parejas, los nietos, los sobrinos y hasta los amigos. Por lo tanto, para hacer la elección más atinada hay que pensar verdaderamente en la persona a quien se celebra. Con esto en mente, presentamos algunos perfiles de consumidores y estilos que pueden simplificar la selección de un vino.

PAPÁ BABY BOOMER (75 a 55 años): La mayor parte de los baby boomers toman vino desde hace décadas, por lo tanto, se trata de consumidores que saben de vino y tienen muy definido su perfil. Si bien para obsequiarles es posible optar por algún vino con algún tinte osado o innovador, suele ser un paladar muy acomodado al gusto tradicional y a los grandes vinos argentinos de siempre; las etiquetas icónicas que marcaron el camino de la vitivinicultura nacional.

Entre ellas podemos citar los Luigi Bosca Finca Los Nobles (los field blends Malbec-Verdot y Cabernet Bouchet) y los siempre vigentes Angélica Zapata, una de las primeras líneas que fue sinónimo de calidad en el vino argentino. Una alternativa más jugada de un vino tradicional para un papá Baby boomer es obsequiar alguna etiqueta de la salteña Bodega Tacuil.


Asimismo, para hacer un regalo de lujo también amerita pensar en las botellas magnum de vinos históricos y emblemáticos.

PAPÁ GENERACIÓN X (55 a 40 años): Esta categoría incluye un amplio abanico de gustos, ya que en ella conviven distintas generaciones. Por lo tanto, una opción interesante es elegir vinos sobrios de perfil moderno, como los nuevos blancos argentinos de alta gama –especialmente los Chardonnay y Semillónque en los últimos años llegaron a un nivel cualitativo inusitado. Excelentes ejemplos de ello son el Altar Uco Edad Media Blanco 2017, el patagónico 45 Rugientes elaborado con uvas Gewürztraminer, Pinot Gris y Chardonnay orgánicas de Sarmiento, Chubut, o bien el Zuccardi Fósil.



Cómo elegir un vino para beber en la cuarentena Sin la obligación de trabajar fuera de casa y con el tiempo suficiente para cocinar platos más elaborados gracias a la cuarentena, muchos argentinos 'confiesan' en que están tomando más vino del que beben habitualmente. Por un lado, influye el boom de las recetas hogareñas, como el pan casero, el pastel de papas, los ñoquis, el guiso de lentejas y las sopas de otoño. Otra alternativa es pensar en los Cabernet Franc que hoy están ganando espacio gracias a su calidad y consistencia; vinos con buena textura, versátiles para acompañar comidas, que se pueden tomar jóvenes o bien guardarlos. Entre ellos recomendamos el Gravas de San Pablo, el Zuccardi Polígonos, el Benegas Estate o bien el Revolver del enólogo Leo Erazo.

PAPÁ GENERACIÓN Y (40 a 25 años): Este segmento incluye tanto a la generación que empieza a tomar vinos como a aquellos que están desarrollando su paladar. La clave aquí es pensar en un consumidor que quiere descubrir; por lo tanto, es más atinado inclinarse por los vinos más osados. Entre las etiquetas nuevas que vale la pena descubrir están Callejón del Crimen Gran Reserva Malbec 2017, el Mythic Block Malbec 2017, el Antonio Más Historia Blend 2015 y Casarena Single Vineyard Jamilla`s de Perdriel 2017, todos de un definido perfil moderno y muy buena calidad.



Otra chance es pensar en un cepaje que se ha expandido cada vez más en quienes disfrutan el vino: el Pinot Noir. Por su color claro, su cuerpo liviano, sus notas frutales y sus toques florales es una grata sorpresa para paladares curiosos. Para quedar de maravillas recomendamos el nuevo Otronia Pinot Noir, el @Michelini Wine Pinot Noir, el Manos Negras Artesano Pinot Noir y el DV Catena Pinot Noir-Pinot Noir.


PAPÁ CONOCEDOR DE VINO. Este es definitivamente el grupo más difícil a la hora de elegir el obsequio perfecto. Al tratarse de personas que han probado y disfrutado muchos vinos a lo largo de su vida y que difícilmente se sorprendan, lo mejor es optar por la originalidad de algunos vinos de culto argentinos. Para “ir a lo seguro” en cuanto a calidad, expresión de terruño y singularidad, recomendamos etiquetas como Zuccardi Supercal 2016, Otronia Chardonnay 2018, el Gran Ememigo Cabernet Franc Gualtallary 2015, o bien el Altos Las Hormigas Appellation Paraje Altamira Malbec 2017; todos ellos vinos de excepción.


PAPÁS QUE RECIÉN SE INICIAN EN EL VINO. Cuando una persona se inicia en el mundo del vino lo que más desea es ir abriendo puertas para descubrir estilos, cepajes, terruños, bodegas y enólogos. El estilo del momento, para descubrir hoy, es el de aquellos vinos de alta gama elaborados con mínima intervención y poca crianza en madera. Entre ellos, la protagonista principal es la fruta fresca y la pureza; son vinos con muy buena textura en boca, criados en vasijas de cemento y fermentados en huevo. Los mejores ejemplos de este estilo son la línea Eggo de Zorzal Wines, los Montesco de Matías Michelini, los Livverá de Escala Humana o bien los fabulosos vinos de Cara Sur, un proyecto que trabaja con viñas viejas situadas en Barreal, en San Juan. Todos ellos son de un estilo fresco, fluido, muy versátiles, y expresan fruta de manera pura y nítida.



PAPÁ CÁSICO/TRADICIONAL. Los consumidores clásicos son aquellos que tienen el paladar forjado por el vino argentino tradicional. Para ellos, una buena alternativa es elegir aquellos Malbec icónicos, criados en barricas, que tengan todo lo que sedujo al mundo entero: taninos redondos, corazón dulce, frutosidad, buen ancho de boca y notas de torrefacción propias de su crianza en roble. Se destacan en este grupo vinos como el Finca La Anita, el salteño Finca Quara con toda la enjundia de Cafayate, el Atamisque de Tupungato, el Terrazas de los Andes Parcel Los Castaños originario el terruño de Altamira, y quienes quieran ir más allá pueden optar por el Runa, de la jujeña Bodega El Perchel.



INNOVADORES Y MODERNOS. Los consumidores innovadores son aquellos que siempre quieren saber qué está pasando en la industria, cuáles son las tendencias y modas tanto a nivel local como internacional. Para ellos, muy probablemente una buena opción sea optar por los naranjos que tanto están creciendo entre los consumidores con su estilo rústico y su textura áspera y agradable a la vez. Los naranjos son vinos de uvas blancas fermentados con sus pieles, a la manera de los tintos, y son vinos con muy buena textura y sumamente versátiles: se pueden tomar de aperitivo, con un sándwich, con sushi e incluso con sopas tipo ramen. Son muy agradables y fáciles de beber, con lo cual gustan fácilmente a todos los consumidores. Los más interesantes hoy en el mercado son el Livvera Malvasía, el Vía Revolucionaria Torrontés Brutal y el Roca Madre de Juanfa Suarez.



Ir a la nota original

MÁS NOTICIAS