FUERTE RECHAZO A SU LLEGADA

Lázaro Báez tuvo que volver a Ezeiza por las protestas de los vecinos que no permitieron su ingreso

Los vecinos se reunieron y tras bloquear los ingresos, se sentaron en la calle y destrozaron el parabrisas del vehículo e el que se trasladaba el exsocio de Cristina Kirchner.

La alegría de recuperar la libertad sin fianza, le duró muy poco a Lázaro Báez: los vecinos del country de Pilar se opusieron al ingreso del vehículo que lo trasladaba y tras serios incidentes, tuvo que retornar a Ezeiza, e donde finalmente el empresario pasó la noche.

Ayer, la Cámara Federal de Casación Penal decidió otorgarle la prisión domiciliaria en la causa de la "ruta del dinero K". A pesar de no estar de acuerdo, el Tribunal Oral Federal (TOF) 4 le notificó al SPF que le pusieran una tobillera electrónica a Báez y lo trasladaran al country de Pilar para que cumpliera allí la domiciliaria.

Sin embargo, al llegar el vehículo fue recibido con una marcha para repudiarlo. El conductor del rodado realizó tres intentos, pero o pudo ingresar. La cuarta vez, alguien destrozó el parabrisas y los demás vecinos se sentaron en el asfalto para impedir el paso.

Finalmente, los agentes penitenciarios decidieron suspender la misión, volver a la Panamericana, hacer escala en la cárcel de Devoto, donde cambiaron la camioneta tras la rotura del vidrio y terminaron de nuevo en Ezeiza.

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