Sometía a su hija a prácticas sexuales con animales, ahora pasará 9 años en la cárcel
La pequeña le contó a su madre que su padre le hacía “cosas malas”, más tarde escribió una carta donde relataba los ultrajes que sufría y que estaba amenazada.
Un depravado sujeto pasará nueve años en la cárcel acusado de abusar sexualmente de su hija por más de dos años según la investigación que llevó a cabo la Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual de La Banda.
Durante la jornada de ayer, a través de una audiencia virtual, se realizó una audiencia de juicio abreviado en que la Dra. Roxana Menini, juez de Control y Garantías de Banda y Robles, homologó un acuerdo y condenó al depravado.
A través de las plataformas virtuales, la Dra. Ana Azar, integrante de la mencionada Unidad, reveló que la causa comenzó en el mes de marzo del año 2019, cuando la madre de la menor se presentó en la comisaría y realizó la denuncia.
En esa oportunidad, la mujer reveló que su hija le había confesado que su padre le hacía “cosas malas”. Justo cuando la niña que en ese entonces tenía 14 años hablaba con su mamá, llegó el acusado quien la amenazó diciéndole que si contaba algo la golpearía.
Ante la actitud de su pareja y el temor de la niña, la mujer no dudó y se presentó ante la policía y radicó la denuncia. Desde entonces, en la mencionada Unidad se comenzó con una serie de medidas, entre ellas que la víctima sea examinada por las psicólogas.
Debido a la angustia de la víctima, desde la Fiscalía se ordenó que la menor reciba contención psicológica en el Centro de Salud Banda. Tras varias sesiones, la menor en una carta le contó a la profesional que la asistía que su padre además de realizarle tocamientos, la obligaba a prácticas sexuales con un canino.
Las aberrantes declaraciones causaron un gran daño emocional en la víctima quien intentó quitarse la vida tras el hecho. La Fiscalía recolectó evidencias en contra del acusado, quien aconsejado por su abogado defensor accedió a ser sometido a juicio abreviado.
Ante la Dra. Menini, el imputado reconoció los ataques sexuales a los que sometía a su hija, desde que tenía 12 años hasta los 14, por lo que la jueza lo condenó a nueve años de prisión efectiva.