La serie “Dom” llega con una profunda historia
¿Qué pasa por la mente de un defensor de la ley, como Víctor, cuando la víctima más grande es la familia?
Flávio: Es el tema central del conflicto y del dilema de estos personajes lo que intensifica mucho lo que él está pasando y por eso quiere, de repente, contar esta historia no del Víctor original sino del Víctor real. Él pasó parte de su vida en esta guerra y en esta lucha en contra del tráfico. Después de un tiempo estaba frustrado, decepcionado porque veía que la guerra estaba como perdida porque los agentes que deberían estar con él no estaban y la corrupción estaba muy arraigada y era imposible continuar. De hecho, el combate y la venta de drogas y la violencia, obviamente, no resultarían buenos frutos. Entonces, él estaba frustrado con eso y, además, tenía a su hijo que fue llevado a este medio con la dependencia química y después de eso al crimen. Entonces, esta distancia entre su anhelo de vida como ciudadano y padre y el resultado de eso en su hijo llega a este gran conflicto que es la serie y es también parte de la relación entre Víctor y su hijo.
¿Qué lo llevó a Pedro a dejar una vida acomodada y sumergirse en el mundo de la cocaína?
GABRIEL: Es difícil tener una seguridad acerca de esta información porque él pa‑ só a involucrarse con la droga muy joven. Yo creo que la serie, de hecho, habla de este tema, de ser muy com‑ plicado de encontrar un culpable. No sirve de nada encontrar un culpable frente a una situación que está muy compleja. Pedro era menor de edad. Es muy complicado hablar de un niño que no tenía noción. En la década de los 90 no había tanta información como hoy. La serie funciona no en la búsqueda de un culpable sino en relación a un alerta sobre este tema y el peligro que causa no solamente para el usuario sino para la familia. Este es el enfoque, el de alerta más que buscar un culpable. En el tráiler se ve cómo desde que Pedro era pequeño, su padre intentaba meterle en la cabeza que si en‑ traba al mundo de las drogas acabaría en la cárcel o muerto.