Empleada de seguridad denuncia a sus superiores: piden “sexo” por “beneficios”
La víctima señala directamente al supervisor y al secretario de la empresa de seguridad privada. Aseguró que ambos la hostigan con llamados y mensajes en los que le proponen mantener relaciones sexuales como “aventura” o como “amigos con derecho”.
Una joven empleada de una empresa de seguridad privada, cansada de ser hostigada y acosada sexualmente por dos superiores se presentó en la Comisaría 5ª y contó el calvario que vive desde hace varios meses y las aberraciones que a diario debe tolerar por parte de los acusados.
“María” (nombre ficticio) tiene 35 años y reside en el barrio Juan Felipe Ibarra.
Ante la policía contó que cumple funciones en el hospital Independencia como guardia interna del nosocomio, de lunes a viernes en un turno fijo.
Explicó que los fines de semana realiza horarios rotativos en guardias de más de 16 horas.
Según contó la joven, hace un año que presta servicios para la empresa y es acosada sexualmente por dos “jefes” desde hace al menos seis meses.
Con tó que la situación ya es insostenible y que teme por su integridad física.
Explicó que los abusos comenzaron primero por parte del supervisor general de la empresa —de 45 años— quien empezó el acoso con insinuaciones y comentarios de índole sexual, para luego proponerle encuentros sexuales.
La víctima narró que el sujeto ante su negativa la llamaba constantemente mientras ella se encontraba trabajando.
Luego ya le hacía videollamadas por aplicación WhatsApp, donde le solicitaba que le mostrara los pechos.
Según explicó la joven, el supervisor le proponía ir a un hotel alojamiento y que ella solo atinó a cortar la comunicación telefónica.
Ante su actitud, el sujeto se presentó mientras ella trabajaba en el hospital donde se acercaba para hacer caricias o según él “bromas”, y mantener una relación de “amigos con derecho”.
A esos hostigamientos se le sumaron los abusos —casi con las mismas formas— por parte del secretario de la empresa, que le propuso encuentros sexuales y una “aventura” a cambio de “retribuciones” en el trabajo tales como mejorar las condiciones y horarios laborales.
La víctima se negó a tal planteo y, además, dejó en evidencia con el secretario al supervisor, pidiéndole que ambos depusieran su actitud ya que ella no quería ningún tipo de relación con ellos.
Siempre en función de la denuncia que la joven realizó, el secretario al enterarse de que su “jefe” también pretendía tener los mismos favores le manifestó: “No puedo hacer nada porque (si él ) toca ahí, entonces yo no puedo tocar. Yo que vos acepto porque te conviene, mira que si no la usas se te va a gastar se te va a arrugar” (sic).
No conforme con los comentarios fuera de lugar, el secretario de la empresa le propuso: “Si quieres también puedo ser donante voluntario para que tengas un hijo, sos linda como para no tener hijos”, por lo que ella les manifestó que los acusaría con otra autoridad.
Ante la denuncia de la víctima, la fiscal de la Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual de turno —Dra. Jésica Lucas— ordenó que se remita la denuncia a la Fiscalía “a los fines de proceder al seguimiento psicológico” de la denunciante.
Cero empatía por parte de su “jefa” y abuso de poder
La joven contó que además de los acosos sexuales por parte de sus superiores sufre malos tratos por parte de una supervisora de quien recibe agresiones verbales en relación a su aspecto físico, menospreciando su forma y actitudes de trabajo.
“Vos no sos capaz de nada, únicamente estar parada en un portón, no tienes ni autoridad, en cualquier momento te voy a suspender”, le habría expresado el domingo cuando le pidió descansar unos minutos.
Explicó que por parte de la acusada, sus compañeros obtienen beneficios que a ella no se los dan.