Morir en la cancha: el drama que crece en el fútbol amateur

Santiago volvió a lamentar la muerte de otro deportista amateur, durante un partido. El último caso, que se dio el pasado fin de semana, se sumó a una importante cantidad de decesos que tuvieron lugar en los últimos meses en la "Madre de Ciudades", lo que encendió la luz de alarma, nuevamente, en la comunidad.

Las víctimas, que por lo general tenían entre 40 y 60 años sufrieron las consecuencias de la falta de controles médicos periódicos, considerados fundamentales para la prevención de la muerte súbita, en todos los contextos, principalmente en éste.

El Dr. José Stenberg, médico cardiólogo y deportólogo, docente de la Facultad de Ciencias Médica de la Universidad Nacional de Santiago del Estero, habló sobre esta problemática, con EL LIBERAL y pidió a los deportistas un mayor compromiso con su salud.

HABLA EL DR. JOSÉ STENBERG Médico cardiólogo y deportólogo

"Consideramos muerte súbita a la muerte ocurrida en forma inesperada durante o hasta una hora después de la práctica deportiva por causa no traumática no violenta en una persona aparentemente sana. Sus cifras reales son variables según los distintos registros en el mundo, pero se estima en 1 cada 50000 deportistas en menores de 30 años y 1 cada 18000 en mayores de 30 años", describió el profesional para poner en contexto la situación.

Reacción

En ese sentido ahondó sobre qué ocurre en el organismo de las víctimas ante un evento de estos.

"En las personas jóvenes las causas cardíacas se relacionan a miocardiopatía hipertrófica y a alguna arritmias de tipo hereditarias, o a la presencia de cardiopatías congénitas no tratadas o no controladas. En tanto que, en los mayores, la causa es fundamentalmente la cardiopatía isquémica, que se trata de la oclusión de arterias coronarias", explicó.

Si bien las cifras citadas por Stenberg hablan de lo que ocurre a nivel Mundial, resaltó que, Santiago no está exenta de esta realidad.

"Nuestra provincia no es ajena a estos hechos lamentables. Sobre todo es lamentable porque son hechos prevenibles. En la mayoría de los casos puede diagnosticarse en exámenes predeportivos, los cuales debería ser realizados mínimamente cada año en las personas que compitan en un deporte, especialmente en mayores de 30 años", consideró el especialista en cardiología.

Y agregó: "La evaluación predeportiva consta de diferentes estudios según la condición del deportista teniendo en cuenta edad, nivel de competencia, factores de riesgo cardiovasculares, antecedentes de enfermedades preexistentes, cuadro clínico, etc. Además del adecuado examen previo, debe haber coherencia en la actitud respecto a la actitud con la cual se decide competir, es decir, tener un nivel de condición física acorde al tipo y nivel de actividad a realizar, entrenar adecuadamente, alimentación adecuada, horarios adecuados para evitar accidentes por calor, indumentaria adecuada etc.".

Idealmente se debería contar con desfibrilador

El Dr. Stenberg advirtió además que "aún con estas medidas adecuadamente realizadas, es posible que se generen episodios de muerte súbita por patologías que no fueron diagnosticadas o por diferentes situaciones, golpes de calor, deshidratación, etc.".

Y cerró: "Ante el hecho de una muerte súbita, idealmente se debería contar con un desfibrilador automático externo, con el cual se puede tratar la arritmia que fue producida por las causas antes mencionadas. Para esto es necesario que la población o al menos el personal a cargo de la institución donde se encuentren, esté familiarizada con el uso de estos equipos ya que fueron pensados para ser manejados por personal no médico con mínima preparación".