Aconsejan prevenir los casos de asfixia por inmersión en los niños Aconsejan prevenir los casos de asfixia por inmersión en los niños
Los casos de asfixia por inmersión en niños son frecuentes en esta época del año en Santiago, ya que por las altas temperaturas muchos de ellos asisten a piletas, tachos de agua o bañeras, para aplacar el calor. Pero con los chicos un simple descuido puede resultar fatal, por lo que los médicos advierten sobre las medidas de prevención a tener en cuenta si se dispone de una piscina en la casa o si los chicos asisten a natatorios públicos, donde se suelen realizar las colonias de vacaciones.
Es fundamental conocer y poner en práctica una serie de medidas de seguridad, ya que sólo bastan pocos centímetros de este líquido para que un niño se ahogue.
EL LIBERAL consultó al Dr. Manuel Barthe, vicepresidente de la Sociedad Santiagueña de Pediatría, quien explicó que muchos de los niños que son salvados de un ahogamiento pueden quedar con lesiones severas, o en estado de coma total.
"Son muchas las secuelas que pueden quedar en las personas que sobreviven a un ahogamiento, conocido como asfixia por inmersión. Es una problemática general del país y sobre todo en esta época. Hay un consenso en la Sociedad de Pediatría y estudios hechos en chicos hospitalizados, para determinar las condiciones en que llegan para ver el pronóstico y el grado de gravedad de acuerdo con el tiempo de sumersión que han estado. El casi ahogamiento es frecuente y hay que prevenir, prácticamente desde los 11 meses hasta los adolescentes. Los casos más frecuentes se ven entre los niños de 2 y 4 años. En el 50 por ciento de los casos, los niños están bajo la supervisión de un adulto e igual suceden estos hechos", expresó el especialista.
Consecuencias
El Dr. Barthe describió que las secuelas pueden presentarse si una persona permanece más de 10 minutos sumergido en el agua.
"Las lesiones son impredecibles, pero pueden ser problemas neurológicos como incapacidad motora, epilepsia de conducciones a futuro, intelectuales, de comunicación, verbal y afasia. Hay distintos grados de lesión neurológica que puede ocasionar la asfixia. Cada organismo responde diferente, pero puede ir desde secuelas neurológicas hasta un coma total, de no despertarse nunca. Sin embargo, hay que aclarar que hay casos de niños que despiertan de la terapia intensiva y que tiene sueño, pero poco a poco se van despertando y restituyéndose en su totalidad, sin secuelas. Hay casos de los dos extremos", indicó.
Por último, aconsejó a los padres a concurrir al centro médico infantil más cercano para la atención de un profesional lo antes posibles.