Dolar Oficial: - Dolar Blue:- Dolar CCL:- Dolar Bolsa: - Dolar Mayorista: -

EL LIBERAL . Santiago

Julio Castillo, el añatuyense que se transformó en un vivo ejemplo para los Infantes de la Marina

02/04/2017 00:00 Santiago
Escuchar:

Julio Castillo, el añatuyense que se transformó en un vivo ejemplo para los Infantes de la Marina Julio Castillo, el añatuyense que se transformó en un vivo ejemplo para los Infantes de la Marina

Julio Saturnino Castillo nació el 19 de agosto de 1943 en el pueblo de Malacara, Añatuya (Dpto. Taboada), Santiago del Estero. Ingresó en la Escuela de Suboficiales de Infantería de Marina el 1 de agosto de 1966. Su carrera naval lo llevaría por destinos como la Escuela de Suboficiales de Infantería de Marina, el Batallón de Infantería de Marina N° 2, la Brigada de Infantería de Marina N°1 , la Base Naval de Infantería de Marina y el Batallón de Infantería N°5.

El Batallón de Infantería de Marina N° 5, con asiento en Río Grande, fue una de las unidades destacadas para operar en Malvinas. El suboficial Castillo se encontraba en ese destino y se ofreció voluntariarimente para combatir. Integró la compañía Nácar, sección que afrontó la parte más dura del ataque en Tumbledown al concentrarse sobre ella el ataque de la Guardia Escocesa. Castillo padecía de epilepsia debiendo, durante la estadía del batallón en Malvinas, ser internado por dos días. Al reponerse pidió regresar con su gente, requerimiento que fue aceptado por sus condiciones de mando y valentía. Su jefe inmediato, el teniente de Fragata de Infantería de Marina, Carlos Daniel Vásquez, al recordarlo tiempo después reproducía las siguientes palabras del suboficial: “Señor, de aquí no me quiero ir hasta que no hayamos terminado de hacer lo que tenemos que hacer… luchar…”. Castillo estaba convencido que con sus acciones en el puesto de batalla colaboraba en la recuperación de las islas.

En la noche del 13 de junio de 1982 la cuarta sección de tiradores de la compañía Nácar del BIM5, sección a la que pertenecía Castillo, comenzó a recibir el ataque del regimiento de la Guardia Escocesa, apoyado por un intenso fuego de artillería, ataque que fue rechazado por los argentinos. Reanudado el asalto, el enemigo hizo pie en la zona y se inició un feroz combate pozo a pozo, hombre a hombre, sobrepasando la débil línea de infantes argentinos. La superioridad británica era abrumadora y aunque las tropas argentinas abatían al enemigo seguían apareciendo más atacantes. Tres de ellos llegaron a la posición del dragoneante Galarza y del conscripto Cerles, ultimándolos a tiros. Al ver en la forma en que habían caído sus hombres, el suboficial Castillo salió de su pozo indignado disparando su arma sobre el enemigo, yendo en auxilio de los heridos. Gritó e insultó matando a sus oponentes, hasta que cayó muerto de un disparo en el pecho.

Murió sin amilanarse, en combate, abriendo senda y transformándose en un vivo ejemplo para los Infantes de Marina. “Castillo, que tenía el grado de suboficial segundo, murió en el combate de Monte Tumbledown, al enfrentar cara a cara a los escoceses que habían matado a los soldados que él tenía a su mando”, contó a EL LIBERAL, el representante de la Asociación de la Armada Argentina y suboficial mayor retirado, de Infantería Marina, Rito Salvador Yocca. El suboficial segundo de Infantería de Marina Julio Saturnino Castillo, héroe de la guerra de Malvinas recibió la máxima condecoración: La Nación Argentina al Heroico Valor en Combate por “…Rechazar en forma individual y por propia iniciativa, el ataque de una fracción enemiga produciéndole severas bajas, posteriormente perseguirlas y continuar combatiendo en permanente y ejemplar actividad de arrojo hasta ofrendar su vida…”

Fue ascendido post mortem al grado inmediato superior, suboficial primero de Infantería de Marina.

Como homenaje, la Armada Argentina bautizó con el nombre ARA “Suboficial Castillo” a un aviso incorporado a su flota de mar el 7 de junio de 1994.

Lo que debes saber
Lo más leído hoy