Arresto domiciliario y posible legítima defensa, la Justicia decidirá

Nadie puede aventurar si a Lescano la aguarda una condena a prisión perpetua, o prosperen atenuantes que, a la larga, la reintegren a la sociedad.

Si hoy es juzgada y hallada culpable, seguramente un tribunal la condenaría a perpetua, pena que la obligaría a pasar en prisión 30 años como mínimo.

Empero, las leyes vigentes atenúan aun ante la muerte misma. Por ejemplo, en caso que la homicida se haya defendido de una agresión previa.

Se trata de una línea delgada en que dos imputaciones tienden a bifurcarse: "legítima y exceso en legítima defensa".

Sin reconocerlo, allí apuntaría sus cañones la defensa, convencida de que el incidente fácilmente puede encuadrarse en una legítima defensa.

Pese a lo incipiente de la causa, carente aún de las conclusiones de la autopsia, se sabe que la defensa trabaja ya detrás del arresto domiciliario.

El abogado cree que el planteo puede prosperar, ya que Lescano tiene 5 hijos, 4 con la víctima, y hay leyes que así lo habilitarían.

Por ejemplo, años atrás en Quimilí una mujer mató a su concubino, durante una grave golpiza del sujeto.

La Justicia la detuvo, concedió el arresto domiciliario y reformuló la causa de "homicidio simple", a "homicidio con exceso en legítima defensa".