Redgrave advirtió sobre el drama de los refugiados

La actriz británica Vanessa Redgrave, protagonista de filmes como "Blow up" (1966) y "Expiación, deseo y pecado" (2007), es una de las figuras centrales del 32° Festival de Cine de Mar del Plata, donde presentó "Sea Sorrow", su primera película como directora, filmada a los 80 años, en la que advierte sobre "el tremendo drama humanitario" de los refugiados que llegan a Europa desde Asia y áfrica.

"Cada vez más los gobiernos europeos están quebrantando la ley, no se están ocupando de su propia gente y las sociedades se sienten cada vez más desmoralizadas", advirtió la gran actriz en una entrevista con Télam, en la que se mostró preocupada por la indiferencia de ciertos gobernantes actuales con la suerte de los refugiados que escapan de sus países en busca de una oportunidad de vida en Europa.

Con los testimonios de Redgrave, Ralph Fiennes, Martin Sherman, Alfred Dubs y Emma Thompson, "Sea Sorrow" nació en parte del trabajo social que la actriz viene realizando en ayuda a los refugiados y a partir del impacto que le produjo la fotografía del niño Alan Kurdi, que apareció muerto en una playa europea, a la orilla del mar Mediterráneo.

"Esto es un compromiso que tengo con los refugiados desde hace muchos años, incluso mientras trabajaba en cine y en televisión. Mi productor y yo decidimos invertir nuestro dinero para poder hacer esta película y estoy muy orgullosa de decir que otros actores y cineastas están contribuyendo a generar conciencia y ayudar a los refugiados haciendo filmes extraordinarios", afirmó la actriz.

Trayectoria

Redgrave fue parte del ciclo Charlas con Maestros, en un encuentro con el público, donde -en compañía de Peter Scarlet, director artístico del festival- hizo un recorrido por su trayectoria, su compromiso social y el paso detrás de cámara con su valiente ópera prima como cineasta.

"Nuestra película es muy específica y es única porque fue hecha con parte de la historia de Alf Dubs que él tuvo la experiencia personal en 1939 cuando tenía 6 años y fue llevado desde Checoslovaquia en el kindertransport, que era el transporte para los niños que estaban escapando del nazismo y que, por presión del pueblo británico, pudieron entrar en nuestro país como refugiados", recordó Redgrave.