El "Petiso Orejudo", el más famoso y sanguinario preso

Dentro de la excárcel de Ushuaia, uno de los puntos que más atrae es la celda que ocupara Cayetano Santos Godino, el "Petiso Orejudo". Fue uno de los asesinos seriales más conocidos en la historia policial argentina.

EL LIBERAL visitó su celda, donde hay una réplica del criminal con una reseña de su accionar delictivo y de la historia de su paso por la cárcel donde finalmente halló la muerte.

Fue capturado a los 16 años, en 1912, hallado culpable de asesinar a niños a los que engañaba y luego prendía fuego, o los golpeaba con piedras en la cabeza o martillaba clavos en sus cráneos.

Calificado como sociópata, fue responsable de la muerte de cuatro niños, siete intentos de asesinato y el incendio de siete edificios. Murió en su celda a los 44 años y según los historiadores, los propios compañeros de pabellón lo mataron por su crueldad, ya que había asesinado a un pequeño gatito que era la mascota de la cárcel.

Su apodo se convirtió en mito y también usado para atemorizar a los niños desobedientes. Su historial asesino también fue llevado al cine.