Ciudadano sueco reclama restitución de su hijo a su expareja santiagueña

Un ciudadano sueco, Nicolás Andreas Aretis (42), solicita a la Justicia local la restitución internacional de su hijo, un menor a punto de cumplir los 12 años, fruto de la relación con una santiagueña que le inició el trámite de divorcio.

De acuerdo con lo señalado por los representantes legales de Aretis, Dres. Antenor Ferreyra y José Luis Achával, la situación tomó por sorpresa al ciudadano extranjero, ya que había venido con su entonces pareja y el hijo de ambos, a pasar las fiestas en la provincia y jamás se le había anticipado la decisión de romper la relación.

Según explicaron, Aretis y García se conocieron en Córdoba en el 2005, cuando él estudiaba el idioma Español. Comenzaron una relación y se casaron en esa provincia. Al poco tiempo tuvieron un hijo, y a los tres meses del nacimiento del único heredero del matrimonio, se fueron a Suecia para radicarse en la ciudad de Upsala.

"Residen ahí cerca de 12 años, durante ese tiempo visitaron a la familia materna en algunas oportunidades", comentó el Dr. Achával.

"Hace cuatro años que no venían y la señora le propone a nuestro cliente pasar las fiestas de Navidad y Año Nuevo en Santiago del Estero. Entonces deciden venir a pasar las fiestas a la provincia y tenían pasaje de regreso para el 10 de enero los tres; incluso habían pedido autorización al colegio sueco para que el niño pudiera faltar unos días", agregó.

De acuerdo con lo relatado por su cliente, el abogado contó: "Un día antes de emprender el vuelo de regreso a Europa, el 9 de enero, el señor Aretis recibe una cédula del Juzgado de Familia de Tercera Nominación en el domicilio donde reside la familia de su esposa (en inmediaciones de la terminal de ómnibus). En ella se lo notificaba que su esposa había entablado un juicio de divorcio".

El letrado indicó que su cliente pidió explicaciones y que la respuesta de su pareja y de su familia política era que "su presencia no era grata" y que le dejaron las cosas en la calle y le exigieron que se fuera.

Instalado en un hotel cercano al centro, el ciudadano sueco inició un contraataque judicial a través de sus abogados y en primer lugar pidió a la titular del Juzgado de Familia de 3ª Nominación, Dra. Carolina Anauate, que se declare incompetente ya que entiende que el pleito lo tiene que dirimir la Justicia de Suecia.

No obstante, también en el marco del inicio del juicio por divorcio, inició "una demanda por restitución internacional de su hijo y pide la aplicación del Convenio de La Haya de 1980, que regula aspectos civiles de la sustracción internacional de menores", explicó el Dr. Achával.

"Actualmente (Aretis) está radicado en un hotel de la ciudad, para ver si puede regresar al niño al centro de su vida y lugar de residencia habitual que es en Suecia", rescató el letrado.

Achával mencionó que el "pedido de divorcio se encuentra suspendido hasta tanto se resuelva la restitución internacional". También mencionó como dato relevante, que la jueza escuchó a las partes por separados, al hombre, a la mujer y al niño, y que al final "ha otorgado un cuidado especial al niño al padre y un régimen de visitas para la madre". Es decir, que el menor está más tiempo con el padre que con la madre.

El abogado indicó que su cliente le confesó que siente que esta visita para pasar las fiestas en Santiago del Estero fue una excusa, ya que su expareja ya habría tenido la intención de quedarse en la provincia con el hijo de ambos. "Esto lo planteó en la demanda, él cree que todo fue una puesta en escena", apuntó.

Finalmente, dijo que hubo un caso similar hace un par de años, de restitución internacional de un menor, que demoró mucho tiempo, en el cual la Justicia local hizo lugar al planteo de un ciudadano español en contra de su expareja, una santiagueña.