Preocupa el creciente consumo de analgésicos y sus graves consecuencias entre la población

En los últimos años creció considerablemente el consumo de medicamentos para el dolor en la República Argentina, un fenómeno al que no es ajeno Santiago del Estero y que genera preocupación entre la comunidad médica y farmacológica, ya que el abuso de este tipo de remedios puede ocasionar serios trastornos, e incluso, la muerte.

Precisamente, el Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímico (Safyb), que releva anualmente al consumo de fármacos por categoría, dio a conocer que cada año, 5.400 personas mueren en nuestro país por el abuso de analgésicos.

En Santiago

En un relevamiento realizado por EL LIBERAL entre farmacias del casco céntrico de la ciudad, permitió confirmar esta tendencia, y determinar que el creciente consumo de productos para el dolor, no solo alcanza a los de venta libre como aspirina, paracetamol o ibuprofeno, sino también de los recetados tipo "opiáceos" como oxicodona, codeína y morfina.

"Es una cuestión cultural e histórica. La gente no quiere sentir dolor y es algo natural también. El problema es la automedicación y el abuso de determinados medicamentos, que terminan ocasionando otros trastornos o al cabo de un tiempo ya no surten el efecto deseado", indicó Jorge, encargado de una de las farmacias consultadas.

En otros casos, coincidieron en advertir que "lamentablemente hay mucha venta ilegal de este tipo de remedios".

"Lo que pasa es que la gente consigue un calmante de venta libre en cualquier quiosco o supermercado, hasta dan de vuelto las aspirinas o el ibuprofeno", lamentaron.

Automedicación

El estudio del Sindicato Argentino de Farmacéuticos, sostiene que "la gente tiene baja tolerancia al dolor y comienza desde edad temprana a consumir analgésicos, primero de los leves y luego de los potentes; hay automedicación y sobreprescripción".

"El 85% de los adultos utiliza analgésicos de venta libre. Dos tercios lo hace mensualmente y un tercio semanalmente, aunque sin conocimiento sobre cómo seleccionarlos e ingerirlos adecuadamente. Falta información por parte del farmacéutico", especifica el informe.

Al mismo tiempo, asegura que "los médicos recetan cada vez más analgésicos opiáceos para dolores de espalda crónico y de articulaciones, ya que los productos comunes no resuelven".

Marcelo Peretta, doctor en Farmacia y Bioquímica y secretario general del Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos, comentó que muchas personas que sufren dolores crónicos, y consumen muchos analgésicos, recetados o no, "lo cual a la larga produce toxicidad gástrica y renal, dolor abdominal y hemorragias digestivas".

"El daño gástrico aumenta si el paciente consume alcohol, fuma o usa algún tipo de corticoides", precisó.

"La sobreprescripción de medicamentos y la automedicación son alarmantes en nuestro país, al punto que diez mil pacientes son internados anualmente por abuso de analgésicos y 5000 mueren", aseguró el profesional.