Salman Rushdie visitará Buenos Aires Salman Rushdie visitará Buenos Aires
otras, recurrentes,
y algunas que generan
sorpresa y gran expectativa.
Sin duda, entre las últimas
está el viaje a Buenos
Aires del escritor Salman
Rushdie (Bombay, 1947),
que llegará a la ciudad en
noviembre, para participar
de una charla en la Biblioteca
Nacional junto con el
director de ese organismo,
Alberto Manguel.
El reconocido autor será
uno de los primeros extranjeros
en alojarse en la
casa de Victoria Ocampo
de la calle Rufino de Elizalde,
que en primavera comenzará
a funcionar como
sede de residencias para
escritores y artistas. Esta
funcionalidad del edificio
de Palermo se inaugurará
para la edición décimo aniversario
del Filba Internacional,
en octubre.
Rushdie, Premio Man
Booker 1981 por Hijos de
la medianoche, caballero
de la orden del imperio
británico en 2007 y ganador
del Hans Christian Andersen
en 2013 por sus inspirados
relatos para niños,
está amenazado de muerte
desde el 14 de febrero de
1989. Entonces el ayatolá
Ruhollah Khomeini, líder
religioso de Irán, lo acusó
de blasfemar contra el islam
en su novela Los versos
satánicos, publicada en
1988 en el Reino Unido.
Este año se cumplen
30 de la publicación de esa
novela que narra la historia
de dos actores de origen
indio que sobreviven a
un atentado terrorista. En
la historia, más bien picaresca,
se intercalan visiones
de un mensajero divino.
Algunas de esas narraciones
fueron consideradas
blasfemas por el ayatolá,
que proclamó la fatwa
en la que comprometía a la
comunidad musulmana a
ejecutar a cualquier persona
involucrada con la publicación
del libro.
Una fundación religiosa
de Irán incluso ofreció
una recompensa en efectivo
por la muerte de Rushdie
y el escritor fue puesto
bajo protección permanente
del gobierno británico.
Dos traductores y un
editor noruego de la obra
cuestionada fueron atacados
por fundamentalistas
musulmanes, y el traductor
de la edición japonesa,
Hitoshi Igarashi, murió
pocas horas después del
ataque.
La fatwa hacia Rushdie
sigue vigente y la recompensa
por su ejecución ya
supera los dos millones de
dólares. Por eso, uno de los
aspectos cruciales de la visita
del gran narrador y ensayista
británico es la cuestión
de su seguridad.