Un hombre se mató de un tiro en la cabeza frente a su propio hermano

Un jornalero acabó con su vida ayer de un disparo a la cabeza, pese al desesperado intento de su hermano por detenerlo.

Todo comenzó el miércoles a la noche en una casa a 18 kilómetros de Monte Quemado, Copo. Allí, un hombre identificado como ángel Cuellar, de 58 años, agobiado por un problema de pareja le reveló a su hermano que se mataría.

De acuerdo con la investigación del fiscal Gabriel Gómez, Cuellar alertó a su hermano que se prendería fuego.

Buscó combustible, dispuesto en poner fin a su vida y durante varios minutos, generó estupor en la familia, en su intento por llevar a cabo el suicidio de esa forma.

Al parecer, el más desesperado fue su hermano, quien no lo dejó un segundo solo.

Sin embargo, en un momento el hombre habría extraído un arma de fuego y se disparó a la cabeza.

Ello provocó profunda desazón en el hermano, ya que hasta último momento había alentado la esperanza de contenerlo.

En minutos, partieron de "Monte" los policías de la Seccional 22, el fiscal Gómez y los expertos de la División Criminalística.

Testimoniales

El funcionario ordenó una exhaustiva investigación, incluida una autopsia esclarecedora.

Entre las diez de la mañana y la siesta, los policías trabajaron en la escena de la tragedia: tomaron fotografías, secuestraron el arma y habrían hecho pruebas de parafina a la víctima y al hermano.

Más allá del triste desenlace, la Fiscalía iniciará una causa para reconstruir la muerte de Cuellar.

La investigación

En la práctica, tomará testimoniales a toda la familia, más vecinos y a la pareja o ex de la víctima.

El hermano señaló que la fatalidad fue resultante de una crisis afectiva, de la cual no pudo salir la infortunada víctima.

Por ende, Gómez desea conocer los detalles finos de los últimos días de Cuellar, hasta el instante en que se dio por vencido.

Por lo pronto, los forenses le proveerán las primeras piezas del rompecabezas, con las conclusiones de la autopsia.