Un grupo de profesionales trabaja para sacar a los abuelos de la soledad

Suele suceder que, el trajín de la vida, lo rutinario o los desencuentros, generan un olvido involuntario (en algunos casos), de aquellos que ya ingresaron a la clase pasiva. Los abuelos son muchas veces desplazados de una sociedad de contratiempos, de obligaciones y de sintonías diferentes a las de épocas anteriores. O bien son ellos mismos, los adultos mayores, los que solos se alejan, se encierran y optan por la soledad, en su afán de no convertirse en ‘cargas’ para sus familias.

Para borrar esos mitos, para levantar las barreras que los separan de esta sociedad, y ser puentes de nuevos vínculos, es que abrió sus puertas el Centro de Día Parque ‘Un lugar de encuentros’. Funciona hace tres años con la única finalidad de brindar contención, amor y diversión, a aquellos abuelos que se encuentran en soledad.

"Recibimos a abuelos de todos los barrios de Capital y La Banda. A través de un convenio con el Pami podemos brindar este servicio gratuito que se inicia diariamente a las 8 de la mañana. Es un servicio puerta a puerta, por lo que todos los días, los adultos mayores son buscados desde sus casas, y se los vuelve a ella, una vez finalizada la jornada, alrededor de las 16. En todo ese tiempo realizamos diversas actividades con profesionales, son clases que los ayuden en lo cotidiano de su vida. Por ejemplo, brindamos talleres de manualidades para activar la movilidad de las manos, hay otros de kinesioterapia en los que a través de juegos se les enseña a cómo levantarse en caso de caídas. Y así hay muchos espacios pensados en ellos y en cada una de sus situaciones particulares", cuentan el Lic. José Atía y la Lic. María Victoria Abregú, quienes integran el plantel de profesionales que asisten a los abuelos.

El Centro de Día Parque, que surgió como un emprendimiento privado cuenta con un convenio con Pami, desde el área de Prestaciones Sociales, el cual permitió poner en marcha este proyecto innovador y de impacto positivo en los mayores. Se trata de un espacio terapéutico de abordaje integral, de permanencia diurna, donde se trabajan dos ejes, por una parte lo cognitivo, y por otra lo motriz. Estos ejes marcan el diseño de los servicios elementales para la diagramación de talleres con planificación de actividades a cargo de profesionales de distintas disciplina, que garantizan el ejercicio de la memora y del cuerpo, como base fundamental de un envejecimiento activo y saludable.

"Lo importante de este espacio es que logramos sacar a los adultos de un estado de soledad. Hoy son alrededor de 40 y todos tienen una historia compleja, con un denominador común: se encuentran solos, pero no se rinden. Entonces, este espacio se generó para eso. Hoy, se convirtieron en grandes amigos, algunos incluso se fueron a alquilar juntos para aminorar gastos y se reúnen siempre a festejar sus cumpleaños. Eso nos llena el alma, porque nuestra intención fue siempre esa: que encuentren un lugar en esta sociedad, que reviva todos los días sus ganas de vivir", explican sobre los objetivos que ya se cumplieron.

Actividades

Para los abuelos, el orden de los talleres no es algo que los desvele. Ellos solo piensan en compartir sus horas con sus pares, sin importar demasiado qué espacio los convoque.

Igualmente, el Centro de Día Parque "Un lugar de encuentros" cumple con un programa de actividades semanales para un mayor control de los adultos mayores.

Es así como los lunes de 10 a 12 funciona el taller Manos creativas y de 14 a 16, el de Psicología; los martes de 10 a 12, Kinesiología, y de 14 a 16, Trabajo Social; los miércoles, por la mañana, Manos creativas, y por la tarde, Baile; los jueves de 10 a 12, Baile, y de 14 a 16, Psicología; y los viernes por la mañana, Kinesiología; y por la tarde, Trabajo Social.

"Todas estas actividades se enmarcan en espacios denominados en diversas áreas como Social, Terapia Ocupacional, Psicológica, Actividad Física, Servicio de Alimentación, y Enfermería. Esto nos permite llevar una evaluación de su evolución y podemos darlos a conocer a los familiares, en caso de que lo consulten", sentenciaron.

Hoy son alrededor de 40, pero el corazón es grande y hay lugar para más. Por eso, quienes deseen compartir los días con el grupo, podrán acercarse a la sede central, que se encuentra en Olaechea 1055 de la ciudad capital o bien comunicarse al 4219851, para interiorizarse de todos los beneficios del Centro.