Los peligrosos cálculos se conforman debido a la acumulación de desechos

Los riñones remueven los desechos y líquidos del cuerpo para hacer orina. Algunas veces cuando se tiene demasiado de algún desecho y no suficiente líquidos en la sangre, estos desechos pueden acumularse y aglutinan en los riñones. Estos bodoques de desechos son llamadas piedras en los riñones o también conocidos como cálculos renales.

Hay cuatro tipos principales de piedras en los riñones:

Piedras de calcio (cálculos de calcio) son el tipo más común de las piedras en el riñón. Por lo general son de calcio y oxalato (una sustancia química natural que se encuentra en la mayoría de alimentos) pero a veces están hechos de calcio y fosfato.

Piedras de ácido úrico se forman cuando la orina es a menudo demasiado ácida.

El ácido úrico puede formar piedras por sí mismo o con calcio. Las piedras de estruvita pueden suceder cuando se tienen ciertos tipos de infecciones del tracto urinario en el que las bacterias hacen un amoniaco que se acumula en la orina. Las piedras de estruvita están hechas de magnesio, amonio y fosfato. Las piedras de cistina están hechas de una sustancia química que el cuerpo produce de forma natural, llamada cistina. Las piedras de cistina son muy raras y ocurren en personas que tienen un trastorno genético que causa que la cistina se escape de los riñones en la orina.

Las piedras en el riñón pueden ser tan pequeñas como un grano de arena o tan grandes -a veces- más grandes que el de una perla. Pueden permanecer en los riñones o viajar a través de los uréteres (los tubo que van desde los riñones a la vejiga) y fuera del cuerpo con la orina.

Cuando la piedra se mueve a través de los uréteres y fuera de la uretra con la orina, se llama pasar un cálculo renal (piedra en el riñón). Una piedra también puede quedar atrapada en el tracto urinario y puede bloquear el paso de la orina. Cuando se pasa una piedra en el riñón o se tiene una piedra grande bloqueando el flujo de la orina, puede ser muy doloroso.