Los anuncios de Macri incluirían un plan de pago impositivo, además del control de precios Los anuncios de Macri incluirían un plan de pago impositivo, además del control de precios
El paquete de medidas
que Mauricio Macri anunciará
hoy contendrá un capítulo
impositivo. Habrá
medidas especiales para
deudores de la Administración
Federal de Ingresos
Públicos (Afip), que se
terminarán de pulir en las
próximas horas.
El Presidente recibirá en
su despacho puntualmente
a las 15 de hoy a Leandro
Cuccioli, titular del organismo,
quien ya estuvo diseñando
el plan durante el fin
de semana.
De esta forma, en la Casa
Rosada entienden que el
anuncio presidencial tomará
nota de lo que hoy figuran
como las principales quejas
de los argentinos: la inflación,
los aumentos de las tarifas
y la presión impositiva.
Sobre este último punto,
desde la Afip son vehementes:
no habrá una moratoria,
ya que una iniciativa de
ese tipo necesariamente debería
pasar por el Congreso.
Y Macri no quiere dilaciones
ni que la oposición capitalice
una medida así para
“facturarle” errores al Gobierno.
La versión más fuerte
suponía que la Afip lanzará
un plan de facilidades
a cinco años de plazo. La tasa
de interés sería similar a
la que existe ahora, del 3%
mensual en los planes de
pagos que están al día. En el
caso de quienes se encuentran
morosos, la deuda se
acumula a un costo del 4,7%
mensual.
La clave será el monto
del anticipo que la Afip impondrá
para quienes busquen
sumarse al nuevo
plan. Ese “peaje” -que podría
ser de entre 10% y 15%
de la deuda total- resulta relevante,
ya que le permite al
organismo una recaudación
de un primer golpe, sin esperar
a las cuotas futuras.
Justamente, una de las
ideas del equipo económico
pasa por intentar una recomposición
de la recaudación
impositiva, que viene
cayendo 10% en términos
reales. Y pone en riesgo el
cumplimiento de las metas
con el Fondo Monetario.
En su reciente informe
de aprobación del nuevo
tramo del “stand by”, el organismo
multilateral reclamó
una mayor dureza impositiva
para que la Afip recomponga
sus números.
Sugirió, por caso, la eliminación
de las exenciones del
IVA para productos de la canasta
básica alimentaria. Es
decir, todo lo opuesto a lo
que le están reclamando al
Gobierno las cámaras empresariales,
los sindicatos,
la oposición política y hasta
sus propios socios.
El desafío de los funcionarios
argentinos es encontrar
medidas que consigan,
al mismo tiempo, aliviar la
carga tributaria sin que impliquen
un costo fiscal, algo
que en este contexto no
tendría el aval del FMI. Y el
plan de pagos para los contribuyentes
en situación de
ahogo financiero parece ser
la medida que cumple con
esas condiciones.
Lo cierto es que, apremiado
por la recesión y la
elevada inflación, el Gobierno
se ve obligado a mostrar
una iniciativa en distintos
frentes.
Por eso, desde distintas
dependencias vienen armando
lo que será un popurri
de medidas, con el objetivo
de mostrar iniciativa y
volver a manejar la agenda
pública, que en las últimas
semanas y meses le fue esquiva
a la Casa Rosada.
El plan de medidas, se
sabe, hará foco en un trabajoso
acuerdo de precios -que
dejará congelados durante
seis meses una canasta de
unos 60 productos de la mesa
familiar (aceite, yerba, fideos,
arroz y otros).
También incluirá el relanzamiento
de beneficios
para los jubilados y receptores
de la AUH. Y habrá un
capítulo especial para las tarifas
de los servicios públicos.
Tanto el tema de los
acuerdos de precios como
en las tarifas, el pedido fue
realizado por el radicalismo
y por Lilita Carrió, ambos
socios fundadores de
Cambiemos.