Una nueva explosión, sin víctimas, se registró al desactivar la policía una bomba Una nueva explosión, sin víctimas, se registró al desactivar la policía una bomba
Una nueva
explosión se registró ayer en
Colombo cuando los artificieros
intentaban desactivar una
bomba hallada cerca de una de
las iglesias en las que el domingo
se produjo uno de los atentados,
aunque esta vez no hubo
víctimas.
La bomba fue hallada por
la Policía cerca de la iglesia
de Saint Anthony, situada en
el norte capitalino, y explotó
cuando los artificieros intentaban
desactivarla, confirmó
a Efe el portavoz de la Policía
de Sri Lanka, Ruwan Gunasekara.
El portavoz explicó que
afortunadamente la explosión
no causó muertos ni heridos.
Saint Anthony fue una de
las tres iglesias atacadas ayer
durante las celebraciones del
Domingo de Resurrección.
Esos ataques comenzaron
de forma simultánea hacia las
08.45 hora local (02.45 GMT),
con potentes explosiones en
tres iglesias y tres hoteles de
lujo, ubicados en Colombo y
dos ciudades vecinas que causaron
cerca de 300 muertos y
500 heridos.
Las explosiones continuaron
horas después con una
séptima detonación en un pequeño
hotel situado a una decena
de kilómetros al sur de la
capital, y la última en un complejo
residencial en Dematagoda,
también en Colombo.
Las autoridades locales
vincularon las dos últimas explosiones,
en las que murieron
cinco personas, entre ellas
tres policías, con el posible intento
de huida de terroristas
implicados en los atentados.
De acuerdo con la última
información revelada por el
Gobierno de Sri Lanka, varios
de los atentados fueron cometidos
por atacantes suicidas
que se inmolaron cargados de
explosivos.
Una veintena de sospechosos
han sido detenidos por estos
ataques, que aún no han sido
reivindicados.
Atentados de esta magnitud
no habían tenido lugar en
Sri Lanka desde la guerra civil
entre la guerrilla tamil y el
Gobierno, un conflicto que duró
26 años y finalizó en 2009,
y que dejó, según datos de la
ONU, más de 40.000 civiles
muertos.