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La conmovedora historia del pastor al que saludó el presidente Macri

12/07/2019 00:14 Interior
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La conmovedora historia del pastor al que saludó el presidente Macri La conmovedora historia del pastor al que saludó el presidente Macri

El presidente Mauricio Macri volvió a dedicar un mensaje de agradecimiento y afecto a un santiagueño. En esta oportunidad, le envió un audio a través de WhatsApp al pastor José Brizuela, de Monte Quemado, quien se dedica a incentivar a niños en la práctica deportiva.

‘Hola José, soy Mauricio Macri para felicitarte y agradecerte por el tremendo laburo que hacen con los pibes en los 15 clubes ahí en Santiago’, se escucha en el mensaje.

Luego, se despide ponderando el trabajo y saludando a toda la gente de la zona. “Yo soy también un creyente de lo que genera el deporte en nuestros chicos. Así que saludos a todos los chicos y a la gente de Monte Quemado’.

José es un pastor que trata de fomentar actividades recreativas y solidarias en los jóvenes y que incluso ha abierto su iglesia en reiteradas oportunidades para que otras organizaciones trabajen ahí.

Trabajo silencioso

Al respecto, José Brizuela destacó “el trabajo que muchos hacen en el interior, en silencio, en lo escondido del monte, en varios lugares”, no solamente él en Monte Quemado.

“Somos parte de un trabajo que considero de suma importancia, el deporte, pero no en sí mismo, que es bueno, sino atendiendo más a lo que hay detrás, la persona, por eso brindamos charlas, organizamos campamentos con los chicos”, detalló.

También puso de relieve el doloroso inicio de este trabajo, que hoy alcanza a más de 1800 niños, adolescentes y jóvenes de 17 escuelas de fútbol de Monte Quemado, pero que empezó por una imcomprensible ola de suicidios que en 2016 sacudió a esta comunidad rural del norte de la provincia de Santiago del Estero.

“Durante la ola de suicidios lo que me llevó a trabajar en esto fue la necesidad de involucrarme, más profundamente. Cada quince días, un mes, dos meses, se nos iban porque ellos buscaban desesperadamente hablar con alguien de confianza: un sacerdote, un pastor”.

“Ahí supe que todos ellos tenían algo en común, hacían deporte, que es muy bueno, pero es mejor si se le agrega contención, acompañamiento, experimentar juntos, que se puede, que todo en la vida se puede superar, y que el deporte es una herramienta de superación para esto”.

Reveló: “Lo vengo haciendo hace tres años y medio a full, pero desde siempre estoy involucrado en el deporte, porque es algo que siempre me gustó”.l


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