Alertan que por la suba del dólar el litro de nafta debería estar en $66

El desfasaje producido en el precio de los combustibles a partir del congelamiento por 90 días implementado por la Secretaría de Energía de la Nación, al fijar un valor del dólar anterior al de las Paso para el sector, implica que hoy el precio real de las naftas y del gasoil debería ubicarse en un promedio de $66 a $77 por litro en el caso de los combustibles normales y premium respectivamente, según lo señalan desde la Cámara de Expendedores de Santiago del Estero (Cepase).

En el escenario actual, el valor de los combustibles acumula un retraso promedio de un 27% en relación con el tipo de cambio vigente previo a las Paso. Pero además, según el presidente de la Cámara, Pedro Llorvandi, hay otros factores que influyen en el valor final como la inflación, que también se aceleró y, además, los nuevos convenios salariales.

“El número que se venía manejando en el sector previo a las Paso es de U$S1,20 el litro en el caso de la Súper; de U$S1,10 en el caso del gasoil y de U$S1,35 tanto en la nafta como en el gasoil premium. Pero si se trasladan esos valores al equivalente del valor del dólar actual, el precio se va muy arriba. La nafta súper se va a unos $68 y la premium arriba de los $70. Por eso decimos que es necesario que pasadas las elecciones se busque un acuerdo entre Gobierno, petroleras y los distintos sectores que intervienen en el mercado, porque si no va a ser muy complicado para el consumidor”, indicó. Agregó que el 4% otorgado de incremento la semana pasada “es un paliativo. Pero entre la inflación, la suba del petróleo y el dólar, quedó todo diluido. Para estabilizar los precios en el mercado libre, como pasará a partir del 14/11, los combustibles deberían ir a esos precios indicados anteriormente”. A su vez, indicó que la crisis económica impactó en una baja “del 20 al 30% interanual en la demanda de combustibles, dependiendo el producto. Pero a su vez también ha caído un 20% el consumo en las tiendas de las estaciones que proveían otra fuente de ingresos. Y para colmo un 25% de las expendedoras en Santiago del Estero están sin combustible, lo cual pinta un panorama muy problemático”.

Señaló que “hoy es muy complicado el mantenimiento de los empleos. Muchos ya han adelantado vacaciones, compensaciones en horario. Pero no sabemos qué pasará cuando se agoten esos recursos. Esperamos una solución de la Secretaría de Energía de la Nacion”.