Extienden detención para albañil que provocó una pesadilla a dos ancianos y los despojó de $ 25.000

La jueza de Control y Garantías de Añatuya, Gladys Liliana Lami, extendió la detención de un albañil oriundo de Buenos Aires, acusado de asaltar a una pareja de ancianos en febrero, fracturar los dedos de la mujer y despojarla de $ 25.000 en el departamento Avellaneda.

En audiencia, la magistrada selló ayer el futuro inmediato de Marcelo Ariel Farías, a quien la fiscal Alejandra Sobrero acusó de los delitos “robo calificado por uso de armas y lesiones graves a una de las víctimas”.

Los ancianos fueron identificados como Lucía Hernández, de 71 años y Danerio Alderete, de 75, propietarios de una empresa de alpargatas con residencia en La Costa, Icaño, Avellaneda.

La historia

De acuerdo con la investigación fiscal, Farías no actuó solo. Se presentó en la casa de la pareja alegando haber sufrido desperfectos con su motocicleta.

En minutos lograron que los ancianos los dejasen ingresar a la vivienda. Previamente, el cómplice habría hecho un seguimiento a las víctimas. Inclusive, se habría presentado en el negocio y adquirido un par de alpargatas.

Con la casa “copada”, los delincuentes amenazaron y golpearon a la pareja. “¿Dónde tiene la plata?”, fue el interrogante amenazante, trascendió.

Reducidos

Alderete fue atado de pies y manos en una habitación.

Aun cuando ya habían encontrado $ 25.000, atacaron a la mujer. Le cortaron los dedos de una mano y provocaron la fractura de una falange. Las víctimas advirtieron la fragilidad de su situación.

Después del maltrato, los delincuentes entendieron que era el momento de partir y alejarse de Avellaneda.

En menos de una semana, Farías quedó en medio de las sospechas y cayó por mera decantación.

Su tonada y condición de foráneo no pasaron desapercibidas y la Fiscalía descubrió rápido ese “eslabón” suelto. En la batalla, Lami dijo no a su libertad y Farías agachó la cabeza cuando lo encerraron en la celda.

Pidieron la libertad de Farías hasta por el coronavirus

A su turno, el defensor, Enrique Crespín, habría instado a la magistrada a concederle la libertad a Farías con base en el protocolo del coronavirus, se supo.

El letrado pidió falta de mérito por considerar que Farías no entorpecería el proceso, ya que el fuerte de la IPP (Investigación Penal Preparatoria) ya se habría cumplido.

Individuo peligroso

Sin embargo, la Fiscalía le refrescó la memoria. Destacó las lesiones padecidas por la anciana. La furia desmedida con la que la pareja fue tratada y su carencia de arraigo, ya que arribó de Buenos Aires tres días antes del golpe.

A criterio de Lami, el planteo no tendría asidero, ya que la causa recién comienza y Farías fue reconocido en una rueda de presos, lo cual lo compromete en demasía en la causa.

El otro, bien lejos de la Justicia y del amigo

El otro, bien lejos de la Justicia y del amigo

Farías quedó para hacerse cargo de todos los pecados de su socio.

Sólo Farías se perfila para recibir una prisión preventiva dentro de 11 días, ya que su amigo se fue de Avellaneda y General Taboada.

Todos los procedimientos por capturarlo fueron infructuosos y los investigadores regresaron con las manos vacías.

Pacto

Vale subrayar que Farías jamás amagó soltarle la mano, aún en medio de su delicado horizonte judicial.

De todos modos, los policías siguen zarandeando al bajo mundo y confían que alguien recuperará la memoria.

En la práctica, los policías creen que los propios cómplices van a entregar al prófugo en pocos días más.l