Macabro hallazgo de restos óseos en una zona montuosa del barrio Villa del Carmen

Una vecina observó que su perro tenía algo entre sus dientes, mientras permanecía en el césped del patio delantero de su casa. Al salir a ver de qué se trataba, se dio con que era una mandíbula, aparentemente de una persona. Alertó a la Policía y en un terreno baldío ubicado en frente hallaron restos óseos humanos, prendas de vestir y supuestamente también un cable.

El macabro hallazgo se registró ayer en horas de la siesta en el barrio Villa del Carmen y obligó un importante despliegue de la Policía, que inició las averiguaciones para tratar de identificar los restos y luego determinar las causas de su deceso. La principal sospecha es que corresponderían a un joven de la zona desaparecido hace un mes, pero algunas incongruencias ponían en duda esta hipótesis.

Todo comenzó ayer alrededor de las 15, cuando una vecina de apellido Ochoa que reside en la Manzana 3 del mencionado barrio, observó que un perro estaba en la parte delantera de su vivienda.

Le llamó la atención que tenía algo entre sus dientes, y al acercarse, advirtió que parecía un maxilar humano, por lo que de inmediato llamó a la Policía.

En minutos arribaron efectivos de la Comisaría 10ª y al entrevistarse con los vecinos, observaron el maxilar en el césped de la casa de la mujer, y allí les informaron que desde hacía varios días se sentía un olor nauseabundo que venía del frente.

Justo frente a la casa de Ochoa, existe un terreno baldío por casi 50 metros, que se interrumpe por un galpón construido, pero cerrado por completo.

Los vecinos señalaron que allí se iba a instar un supermercado chino, pero los robos y daños a las instalaciones antes de que se concrete su apertura habrían hecho desistir a los comerciantes.

Los policías ingresaron al sector y en un breve recorrido, habrían observado en cercanías, entre las malezas, numerosos huesos que a simple vista parecían ser humanos, prendas de vestir y otros elementos, por lo que decidieron preservar la escena, solicitaron la presencia de sus pares de la División Criminalística, División Bomberos e informaron de la situación al fiscal de turno, Dr. Ramón Rubén Alfonzo.

La llegada de los móviles de la Policía alarmó a los vecinos del sector y rápidamente se comenzó a conocer la noticia, por lo que en minutos se agolparon varias personas.

Mientras los peritos realizaban su trabajo, desde atrás del cerco policial, se acercaron unos jóvenes con angustia. Explicaron que vivían del otro lado de la manzana y que su hermano de 26 años, llevaba poco más de un mes desaparecido.

Los efectivos de Criminalística procedieron al levantamiento de los restos óseos, preservándolos para los estudios antropológicos correspondientes. También habrían descubierto prendas de vestir, un short, un boxer, una remera blanca y un gorro.

Los expertos realizarán pericias pertinentes y luego harán una prueba de ADN a los restos óseos para tratar de cotejarlos y establecer su identidad.

Angustia ante la posibilidad de que sea vecino de la zona

Con incertidumbre y angustia, hermanos de un joven desaparecido hace poco más de un mes, esperaban algún tipo de información de la Policía. El temor los invadía creyendo que podría tratarse de él. Los investigadores eran prudentes.

Entre los nervios, no recordaban cómo había salido vestido la última vez que lo vieron. Coincidían en que llevaba puesto un gorro.

Se trataba de un joven de 26 años, que según sus hermanos, tenía problemas de adicciones y nunca se ausentó tanto tiempo.

Sospechan que los restos le pueden pertenecer a él.

Un antropólogo forense analizará los huesos hallados

El Dr. Alfonzo dispuso que los restos óseos sean trasladados a la Morgue Judicial para ser sometidos a pericias por parte de los especialistas.

En un adelanto, los peritos habrían deslizado que corresponderían a una persona joven.

Los antropólogos determinarían si corresponden a un hombre o una mujer y el tiempo que llevaban en la zona montuosa.

El joven desaparecido en el barrio, fue visto por última vez hace poco más de un mes. Difícilmente -si se tratara de él- sus restos podrían haberse reducido a huesos.

También resulta extraño que el olor nauseabundo sólo se percibió por los vecinos desde el fin de semana.

Muchos interrogantes que las pericias buscarán despejar en los próximos días.

El fiscal aguardará los resultados antes de ordenar nuevas medidas.