La misa es sagrada para los menonitas

Los menonitas son un grupo religioso cuya doctrina se basa en la Santa Biblia como palabra de Dios. Tuvieron su origen en Suiza en 1525 y luego se expandieron hacia el norte de Alemania y Países Bajos durante la Reforma Protestante del siglo XVI. El nombre viene de Menno Simons, un sacerdote de la Iglesia Católica. Simons fue un líder religioso anabaptista de los Países Bajos.

Menno fue contemporáneo de los reformadores protestantes. Sus feligreses fueron llamados “discípulos de Menno” y, más tarde, “Menonitas”. Son incluidos en el grupo de los protestantes. Son pacifistas, niegan el servicio militar y cualquier servicio con armas. Y la celebración de la misa es, literalmente, sagrada y no hay cuarentena que lo impida.

“Celebramos la misa porque tenemos que agradecer a Dios que nos protegió y no hay casos (de coronavirus) aquí. Celebramos la misa, pero con máximo de 30 personas cumpliendo con el distanciamiento social. De esta actividad hemos informado a la policía”, resaltó Bartsch en su entrevista exclusiva con EL LIBERAL.

Una historia de persecución

Los menonitas sufrieron persecución en Europa, y tuvieron que emigrar a regiones donde podían recibir una limitada tolerancia. La inmigración de menonitas de idioma alemán hacia la Argentina comenzó en los años 1985 a 1987, procedentes de México, Belice, Paraguay y Bolivia. En la Argentina se instalaron en Guatraché, a 160 km de Santa Rosa, La Pampa (denominada La Nueva Esperanza) y dos comunidades agrícolas en Pampa de los Guanacos, Santiago del Estero. Las comunidades más recientes viven en las provincias de Salta desde 2011 y San Luis desde 2014.

Cómo es el día a día en la Colonia Menonita

Los menonitas llegaron Pampa de los Guanacos hace cerca de 25 años desde México, rechazan el uso de mucho de la tecnología moderna y llevan su vida dentro de su colonia, sin demasiado contacto con el exterior, lo que no ha sido problema para desarrollar una “relación muy buena” con los pueblos más cercanos, como es el caso de Pampa de los Guanacos.

Entre otras características se encuentra su decisión de desvincularse del Estado en todo lo posible y, por ejemplo, sus hijos estudian en escuelas dentro de las propias colonias.

Las familias distribuidas en siete colonias con más de 800 habitantes crian vacas, cuya leche se utiliza para los quesos, mientras que el resto de colonos vive también de la agricultura, la ganadería y algunos talleres que fabrican maquinarias agrícolas y últimamente ollas de acero fundido entre algunos elementos.

Las autoridades municipales de Pampa de los Guanacos y las autoridades menonitas, tales como el gobernador, el vice y el obispo mantienen una constante, fluida y cordial relación. El intendente César Andrada mantuvo al inicio de la pandemia diversas reuniones en las que, junto a efectores de salud, explicó las reglas establecidas por el Gobierno Nacional. Aceptaron la decisión de bloquear todo tipo de accesos a la Colonia Menonita y dejar un solo paso para ingreso y egreso que es utilizado por ambos para solucionar problemas de salud o para que puedan brindar sus servicios. Dichos servicios son muy utilizados por los habitantes de la ciudad por el bajo costo de la mano de obra. Sus trabajos son muy solicitados y por ello se mantienen puentes cordiales entre ambas comunidades.

Los menonitas aceptan al ingresar ser rociados con sanitizantes. Se les toma la temperaturas y se verifican todas las medidas de precaución que instruyen el personal de enfermería y policial ubicados en los accesos. La producción y venta de los quesos menonitas reconocidos por su sabor se vio afectada sensiblemente al inicio de la cuarentena.

En cuanto a la educación, al inicio de la pandemia se suspendieron las clases y los chicos hacen tareas en sus casas. Se ponen en práctica medidas constantemente como el lavado de manos con agua y jabón, el uso de lavandina y en menor medida el alcohol en gel.

En lo religioso se desarrollan misas en las dos iglesias con pocas personas a pesar de que están en tiempo de Pascua. Luego continúan con bautismos para luego de 7 semanas finaliza cuando es el día que Jesús subió a los cielos.

Abraham Kassen, ex gobernador dijo que lo negativo de este tiempo de encierro es que a pesar de que están vedados los accesos a la colonia, se incrementaron los robos porque ingresan en motos algunos a robar y otros a cazar. Dijo que lo hacen los sábados y los domingos, lo que ya fue denunciado ante las autoridades policiales.

“Rogamos a Dios que esta pandemia pase pronto ya que si llega a ingresar el virus esto va a ser catastrófico ya que en los países que lo están padeciendo, las muertes se suceden a cada momento”, concluyó. l