Panaderos alertan por baja de consumo, venta ilegal y por el empleo en el sector

El impacto de la pandemia de coronavirus en la actividad económica local golpeó a todos los rubros en general pero en las panaderías señalan una caída del 30% del consumo, en plena temporada alta para el sector, además de un crecimiento de la venta ilegal de panificados, situación que de mantenerse derivará en menos horas de trabajo y despidos de personal según alertaron desde el Centro de Industriales Panaderos (CIP) local.

Desde el Centro, que nuclea a más de unas 400 panaderías de la Capital y de toda la provincia, apuntaron que la venta de productos se encuentra en declive en estos negocios cuando el invierno es, estacionalmente, la temporada de mayor consumo en el año de productos panificados.

“A las panaderías nos ha bajado muchísimo la venta con respecto al año pasado, prácticamente un 25 a 30%, eso es lo que está sucediendo, en esta época del año con las bajas temperaturas sabíamos vender muchísimo, pero tenemos una competencia desleal porque en todas las esquinas la gente ha puesto venta de pan”, señalaron desde la entidad.

Puntualizaron que “cuando se recorre las calles de la ciudad, se puede ver que se han abierto muchísimas ventanas de quioscos, verdulerías, pollerías, en donde se vende pan, por eso tenemos una competencia desleal terrible”.

En las panaderías, “ha bajado totalmente el consumo por la caída del nivel adquisitivo y también por todos estos negocios que han abierto y que antes no estaban”.

Desde la institución expresaron que la situación es cada vez más complicada para el rubro y se agudiza con la venta ilegal.

“A todos los panaderos les ha bajado la venta y al bajar la venta se fabrica cada vez menos y si esto sigue así, hay que imaginar si pasa un mes más o dos meses más, se van a empezar a reducir los horarios de trabajo de los empleados y también va a haber despidos”, alertaron.

Al margen del comercio ilegal de panificados, señalaron que el sector también está golpeado “porque nuestra materia prima aumenta todas las semanas, el dulce de leche, las margarinas, la levadura, la harina y toda la actividad se vuelve más difícil de desarrollar”.

Puntualizaron desde la entidad que “han abierto muchísimos negocios y no se está controlando nada, por eso nos están afectando muchísimo”.

Destacaron los panaderos que los únicos aumentos de ventas que tienen en el mes “es solo cuando cobra la administración pública, los jubilados, el IFE que son muchos millones de pesos en Santiago ahí vemos un movimiento pero después se para totalmente toda la actividad y el consumo”.