Destacan la importancia de cuidar los vínculos afectivos

Desde la Sociedad Argentina de Pediatría recordaron a la comunidad, la importancia de cuidar los vínculos afectivos y la salud emocional durante la cuarentena, entendiéndose lo fundadamente a atender las necesidades sociales de cada persona. En ese contexto destacaron algunas pautas para reconocer y hacer acciones para mejorar el bienestar durante este complicado momento.

Reconocer lo que nos pasa: “Resulta difícil ser indiferente a la emergencia que vivimos, especialmente por la incertidumbre general. Debemos aceptar la influencia emocional que estos hechos provocan como parte de la realidad, e impulsar y afianzar emociones positivas. Será más claro el camino si se enfoca la energía en medidas que busquen aliviar el estrés y orienten a la solución del problema”, aconsejan.

Sobre la empatía y solidaridad sostienen: “Uno no puede solo con todo esto y a su vez los otros tal vez necesiten de nosotros. Hablar sobre las preocupaciones, escuchar y ser escuchado.

Se necesitará de conductas empáticas, comprensivas que permitan ejercer la solidaridad. Debemos mantener la mirada precisa para reconocer en otros compañeros circunstancias emocionales de riesgo y ofrecer ayuda prontamente. Si los hechos fueran abrumadores, cobran especial dimensión pequeños actos cotidianos que den alegría y fortalezcan vínculos”.

En cuanto a una comunicación eficaz, indican: ‘Evitar en la medida posible que este conflicto altere nuestras relaciones humanas. Tener con quién compartir preocupaciones y sentimientos aliviará el estrés. Encontrar maneras para mantener la relación con nuestro entorno es imprescindible para nuestra salud mental’.

La relación con la familia y los amigos debe mantenerse

Desde la Sociedad Argentina de Pediatría, a través de la Subcomisión de Ejercicio Profesional, remarcan además la importancia de la “familia, amistades, camaradería”.

Sobre ello, indica que son el “sostén fundamental para nuestra vida. Aún con las restricciones que impone el aislamiento, mantener los lazos que permitan estas tres formas humanas de relacionarse permitirá yugular o atemperar momentos desagradables”.

Finalmente remarcaron la influencia de todos estos aspectos en el entorno de trabajo.

“En el ambiente laboral, todo lo anterior contribuye a la predisposición a mantener ambientes de trabajo saludables, donde se tengan en cuenta las necesidades de sus integrantes, se garantice su seguridad y el acceso a información actualizada. Cualquier pediatra debería buscar esto, por la salud física y mental propia y de sus demás compañeros de trabajo”, expresan desde la Subcomisión de Ejercicio Profesional.l