Especialistas recomiendan el autoexamen de lunares como prevención del cáncer de piel

Con el objetivo de concientizar a la población acerca de la importancia que tiene la salud de la piel, la Sociedad Argentina de Dermatología, en conjunto con la Asociación Civil de Dermatología de Santiago del Estero, como todos los años, realizó la Campaña Nacional de Prevención de Cáncer de Piel, y en contexto de esta pandemia que limitó las consultas presenciales con los especialistas, aconsejaron la realización de un autoexamen para chequear el estado de los lunares o manchas.

Al mismo tiempo, alertaron con la llegada del verano, que la exposición a los rayos ultravioletas del sol, pueden desarrollar cáncer de piel, ante lo cual recomendaron limitar el tiempo de exposición.

Las médicas dermatólogas, doctoras Mariana Llapur y Gimena Sánchez Ugalde, coordinadoras de la campaña nacional en nuestra provincia, apuntaron que “el cáncer de piel es el tipo más común de cáncer del cuerpo humano, en los últimos 30 años más gente ha desarrollado un cáncer de piel que cualquier otro tipo de cáncer”.

“Una de las causas más importantes para su desarrollo es la exposición a las radiaciones ultravioletas (RUV) provenientes del sol y de otras fuentes de radiación como las camas solares. Otras causas menos frecuentes son la exposición repetida a rayos X, la presencia de cicatrices importantes y crónicas por quemaduras severas, la exposición ambiental al arsénico y algunas enfermedades genéticas”, puntualizaron.

Aseguraron las profesionales que “el daño que produce el sol en la piel es acumulativo e irreversible, la exposición solar reiterada sin protección, producen a largo plazo, envejecimiento prematuro de la piel, lesiones precancerosas y cáncer de piel”.

Fototipos

Explicaron que, “si bien todas las personas tenemos riesgo de desarrollar cáncer de piel, éste es más frecuente en personas de fototipos claros, personas de piel blanca, rubias, pelirrojas, de ojos claros”.

“Nuestras recomendaciones para prevención de cáncer de piel son: usar de manera habitual, incluso los días nublados, crema con protector solar de amplio espectro para radiaciones UVA y UVB, de factor de protección de 30 o más, de marca reconocida; aplicar protector solar 20 minutos antes de exponernos al sol, reaplicarlo cada 2 horas, y cada vez que salimos del agua; evitar exponerse al sol entre las 10 y 16; usar sombrero de ala ancha, anteojos con filtro UV certificado, camisas manga larga y de colores claros”, ilustraron .

Enfatizaron que los niños menores de un año no deben ser expuestos al sol directo, deben estar bajo la sombra, con sombrero y ropa liviana, y deben tomar abundante líquido para evitar la deshidratación.

“A partir de los 6 meses ya pueden utilizar protector solar, específicos para bebés”, añadieron.

Finalmente, aconsejaron “no concurrir a camas solares ya que son fuentes de radiación UV a gran escala, y fueron catalogadas por la OMS como cancerígenas”.l

Qué tener en cuenta

Para la realización del autoexamen una vez por mes, para chequear lunares y/o manchas, sólo se requiere de una buena iluminación, dos espejos y un peine.

A qué debemos prestar atención: A: Asimetría, B: Bordes; C: Color; D: Diámetro; E: Evolución.

Signos habituales que hacen sospechar de cáncer de piel:

Mancha rosada o rojiza, áspera al tacto, rugosas o escamosas que aparecen en zonas más expuestas al sol como cara, dorso de manos, cuello, orejas, labio inferior.

Aparición de bultos en la piel que crecen en forma sostenida en el tiempo. Lastimaduras en la piel que no cicatrizan a pesar de un tratamiento correcto.

Herida sangrante, costrosa, sin un traumatismo previo que no cicatriza a pesar de tratamiento adecuado. Lunar que cambia de color (o tiene varios colores) sus bordes se vuelven irregulares, es asimétrico y crece, pica, sangra o se inflama.l